Urge concretar menstruación digna como un derecho; aún no se garantiza

Vanessa Baez

En México, cada mujer o persona menstruante gasta aproximadamente 14 mil pesos a lo largo de su vida en productos de gestión menstrual. La suma anual aproximada es de 322 pesos considerando los precios estándar de los productos actualmente.

En el diálogo “Menstruando desde los medios de comunicación” impartido este viernes por “El Taller de Metzli”, resaltaron la importancia de reconocer el derecho a una menstruación digna en contextos como México, donde 4 de cada 10 mujeres viven en situación de pobreza o sin acceso a servicios básicos como agua potable.

La charla impartida por Iris Montserrat Carrillo, Natali Ixchel Téllez, Ari Calzada y Mariana Camacho, integrantes y compañeras de la comunidad virtual feminista “El taller de Metzli” se realizó en colaboración con la Coordinación Institucional de Equidad de Género (CIEG) de la UAEMéx.

Durante el diálogo señalaron la importancia de reconocer las desigualdades que se agudizan ante la pobreza menstrual, es decir, existen desventajas en gran parte de las personas menstruantes para acceder a productos de gestión menstrual como toallas sanitarias, ecológicas, tampones, copas, etc.

A pesar de que desde el pasado 21 de octubre de 2021 se aprobó la eliminación del 16% del IVA en este tipo de productos en México y entró en vigor a inicios de este año, los esfuerzos para garantizar el derecho a una menstruación digna no terminan ahí, también es necesario reconfigurar los estereotipos aprendidos desde la educación y los medios de comunicación dentro de lo social.

Debe terminar promoción de ideas falsas sobre la menstruación en los medios

¿Cuántas veces hemos visto en anuncios comerciales una toalla con “sangre azul” o llena de brillitos rosas? La respuesta es que históricamente el cine, la televisión y la publicidad han reproducido esta idea errónea y romanizada. Las integrantes de esta comunidad virtual, destacaron la gran influencia que han tenido los medios de comunicación para crear imágenes distorsionadas de la realidad de la menstruación.

También resaltaron la importancia de ver este proceso como algo natural y de romper los tabúes que existen alrededor, así como de nombrar a todas las identidades menstruantes e incluirles en el discurso como forma de romper los estereotipos y discriminación.

Los medios de comunicación han representado y construido referentes significativos sobre cómo se vive (o debe vivir) la menstruación, pero… ¿qué tipo de mensajes son los que emiten y cuál es su impacto?

“Los medios de comunicación masivos son la voz y el reflejo de la sociedad, por lo que se ha visto (la menstruación) como algo que es mejor ocultar, cambiarle de color, algo que no hay que hablar. Es un tema que también sexualiza y lo han hecho exclusivamente para las mujeres.

Ninguna de las publicidades nombran la menstruación con su nombre propio, incluso se muestra la sangre de color azul. Los mensajes tienen que ver con tapar los síntomas”, señaló Natali Ixchel.

A pesar de que generacionalmente han existido cambios y mejoras en la representación de la menstruación, todavía hay muchos retos por delante para que el mensaje llegue y también se garanticen los derechos a vivir este proceso de manera digna y tener suficiente información de calidad sobre ella.

“Si bien en la actualidad ha habido una apertura más grande, nos sigue faltando ver este tema representado, a pesar de que hay millones de personas que tienen este proceso, se nos ha fallado en la información y representación de la menstruación”, mencionó Iris.

Finalmente, las integrantes del Taller de Metzli mencionaron que dicho espacio es una comunidad virtual con perspectiva de género abierta para recibir y acoger a personas interesadas en ofrecer algún tipo de taller o charla informativa para compartir el conocimiento.