Alfonso Godínez Mendiola
Ayer se conmemoró el 71 aniversario del natalicio de Luis Donaldo Colosio Murrieta, y en el CEN del PRI, del cual el sonorense fue presidente del 3 de diciembre de 1988 al 8 de abril de 1992, se le rindió un merecido homenaje que fue presidido por el líder nacional Alejandro Moreno Cárdenas, quien dijo que fue “un priista excepcional que siempre puso por delante el progreso y la grandeza de México. En nuestro Partido lo recordamos hoy y siempre con profundo respeto a su legado.” NOTAS CORTAS: Por cierto, en la guardia de honor ante el busto de Luis Donaldo Colosio, estuvo el ex líder estatal del mexiquense, Carlos Iriarte Mercado, el estratega de la dirigencia nacional del tricolor… Si por una frase recordamos a Luis Donaldo Colosio, es por aquella que hacía referencia a su procedencia de “la cultura del esfuerzo” y no de “la del privilegio”, y porque como candidato presidencial, dijo en su histórico discurso del 6 de marzo de 1994 (18 días antes de que lo mataran) en el monumento de La Revolución (que para muchos fue la ruptura con Salinas de Gortari) que: “No queremos candidatos que, al ser postulados, los primeros sorprendidos en conocer su supuesta militancia, seamos los propios priistas”. Y en el PRI del Estado de México es donde más se pisotea el ideal colosista, con su profundo desprecio a “la cultura del esfuerzo” y la consolidación de la cultura del privilegio, del nepotismo y del despotismo, pero sobre todo, de su pretendida perpetuidad del poder de unas cuantas “dinastías” pueblerinas a través de sus nefastos y repugnables “juniors lelos”, la monarquía de petatiux, en su versión “atlacomulca”, y no me refiero al municipio ni mucho menos a su gente, que merecen todo mi respeto, sino al grupo regional del poder estatal que sentó ahí sus bases desde los años 40. Si hoy viviera Luis Donaldo y no hubiera tenido el orgullo de ser del norte (como también lo decía) sino mexiquense, jamás hubiera podido desarrollar una carrera política en este tipo de priísmo, y todo por no ser un “hijo de papi”. Tal vez por eso, para el PRI estatal que preside Paulina del Moral, la fecha pasó desapercibida, totalmente olvidada. ¡Vamos, ni siquiera en las redes sociales! Pero preferible eso que los anteriores homenajes hipócritas… Obviamente, esa condición no prevalece en el PRI de otros estados del país… Y a todo esto, casi tres décadas del magnicidio, lo que queda del “Colosismo” está fuera del PRI, mientras que el Salinismo sigue con fuerza, con miembros de su familia empoderada… El PAN avaló a 18 de sus aspirantes a candidatos a presidentes municipales y diputados locales, entre las que destacan Angélica Moya para alcaldesa de Naucalpan, y quien también sería abanderada del PRI y del PRD; mismo caso con Karla Fiesco en Cuautitlán Izcalli, y por quién votaría Paulina del Moral; la esposa de Enrique Vargas en Huixquilucan y el empresario Fernando Flores en Metepec, candidatura largamente anunciada, ¿permitirá en su planilla al junior hijo de Nemer? Todo indica que sí, pues es propuesta de su papi ¡perdón! del PRI. También van por la reelección Óscar Hernández, de Calimaya y con el apoyo del PRI y PRD, así como el ex priísta Gustavo Mancilla en Villa del Carbón. En 2018 el PAN fue la segunda fuerza y ganó 31 ayuntamientos,10 más que el PRI. La Comisión Organizadora Electoral (parece que le pusieron ese nombre para que sonara como CEO de empresa) que preside el ex diputado local de bonito nombre, Álvarez Bravo, no informó si por Ocoyoacac va la actriz y ex “timbiricha” “Bibi Gaytán”, esposa de Eduardo Capetillo, el que perdió con las siglas del PRI en 2018… ¡Ánimo raza, ya casi es fin de semana! ¡Y arriba el Correcaminos que ayer empató!
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