Senen Viñas, enviado especial
La última jornada cumplió todas las expectativas: primero, por la medalla de bronce, Canadá y Estados Unidos se trenzaron en un duelo de toma y daca. De entrada en el primer cuarto, los de la hoja de maple, se fueron encima a los estadounidenses, ganándoselos por 9 puntos, 34-25; pero para el segundo cuarto ya entró en acción la maquinaria NBA, ganándolo por 7 puntos 31-24, yéndose al descanso con un marcador ajustado 58-56, ganando apenas por dos puntos Canadá.
Para el segundo medio, ante la desidia probada de los estadounidenses, los canadienses aprietan ganando el tercer cuarto por 7 puntos, 33-26, dejando el marcador 91-82, 9 puntos arriba; sin embargo los de la NBA, fieles a su práctica de apretar en los últimos cuartos, lo gana por 9 puntos, 29-20, alcanzando angustiosamente a dejar el marcador empatado a 111 puntos y forzando la consabida prórroga de 5 minutos, en la cual los canadienses aprovechan el inexplicable fallar de los estadunidenses para acometer con éxito el aro de los canadienses, que así ganan el tiempo extra 16-7, para ganar el juego 127-118, en un duelo de subidas emociones.
La final entre Serbia y Alemania no desmereció en nada. Sin importar que los momios daban como favoritos a los ex yugoeslavos, los alemanes salieron a hacer lo suyo con mucha aplicación: primero logrando atemperar el explosivo ataque serbio, prodigándose en el marcaje presionado a Bognadovich, teniendo que surgir Abramovic, como el tirador estelar de 3 puntos, reluciendo entonces la capacidad defensiva germana, para evitar que los serbios tomaran mucha ventaja en el marcador, manteniéndolos siempre a tiro de piedra.
Asi entonces, los alemanes pierden el primer cuarto apenas por 3 puntos, 226-23, demostrando que su estrategia empezaba a funcionar, cuando ganan el segundo cuarto también por tres puntos, 24-21, dejando para el medio tiempo el tanteador parcial en un salomónico empate a 47 puntos. Empero, para el 2º medio, la bondadosa estrategia defensiva germana se refleja en la precipitación con la que empiezan a tirar y fallar los serbios, contrastando con la gélida eficiencia alemana para anotar, lo que les permite ganar el 3er cuarto con 12 puntos de ventaja, 22-10, dejando el parcial 69-57.
Y aunque para el ultimo cuarto, Serbia parece sacar fuerzas de flaqueza y lo gana por 6 puntos 20-14, esto ya no le alcanza para remontar, porque la frialdad alemana entra en juego para romperles el ritmo, dejando el marcador final en 83-77, con lo que el nombre de Alemania pasó a ser grabado en la copa que reciben con gran festejo, y la cual tendrán que defender en Qatar 2027.
(Foto: web)
