Ivan Joatzay
“Tolontli”, de significado “esfera” en náhuatl, es el nombre que lleva el primer taller mexiquense dedicado específicamente a la producción de esferas, adornos y decorativos a través de la técnica artesanal de vidrio soplado, ubicado en la colonia 5 de Mayo en el barrio de Santa María Zolotepec.
En entrevista con Portal, Pedro Morales, fundador del primer espacio de producción de esferas navideñas de método artesanal en la zona del Valle de Toluca, contó que su proyecto surge como una iniciativa por no solo impulsar la artesanía y producción de decorativos en la capital mexiquense, sino, también por desarrollar el aspecto económico en su municipio: Xonacatlán.
“Nos sentimos muy motivados porque, además, hemos empezado con el pie derecho. El producto le ha gustado a la gente que nos ha visitado y eso nos motiva para llegar a pensar que podemos… dicen que caballo que alcanza, gana, entonces pensamos que a corto plazo pudiéramos llegar a ser uno de los grandes productores [en artesanías de vidrio] en la república mexicana, representando al Estado de México” expresó Morales.
¿Cómo surgió Taller “Tolontli”?
De acuerdo con el artesano, su emprendimiento nace a través de la inspiración de su municipio, donde, anualmente existe la tradición de, anualmente, dedicarse a la producción de Navidad y, en busca de expandir las ramas de venta, decidió crear la primera oportunidad para complementar las ventas de su residencia:
“Xonacatlán ya formó parte como el productor número uno en el estado de México de producir el árbol de Navidad, entonces, al ver nosotros que los árboles salen desnudos y es solo el árbol, hoy queremos ponerle las esferas” afirmó Pedro.
A pesar de los obstáculos, Morales contó que, si bien no contaba con un contexto o referentes directos de los cuales heredar las técnicas artesanales del vidrio soplado, en busca de concretar su iniciativa buscó la forma de aprender a hacer esferas de vidrio donde, tras calentar una varilla de vidrio neutro con un soplete, cada artesano da forma a las esferas a través del soplado y moldeado con sus manos. Asimismo, el residente de Xonacatlán contó que fue “revisando desde un tutorial hasta ir a ver cómo lo hacían en otros lados” que aprendieron y perfeccionaron el proceso que ahora define todas las esferas y decorados del taller mexiquense.
Actualmente, con un año y medio desde el nacimiento del proyecto, Pedro afirma que “Tolontli” es un proyecto que llegó para quedarse y comenzar a desarrollar los primeros espacios de artesanías en vidrio dentro de la entidad a pesar de contar con competencias tan directas como los productos de la ‘Feria de la Esfera’ llevada a cabo en Tlalpujahua Michoacán, lugar aledaño al Estado de México y que es conocido nacional por ser “el pueblo de la esfera”.
¿Qué puedes encontrar en el primer taller de esferas de Xonacatlán?
Dentro de la charla con Pedro, el artesano contó ante Portal que, si bien recién está comenzando el trayecto de su emprendimiento, ya se están especializando por hacer del taller “Tolontli” un lugar en el que exista variedad, accesibilidad y opciones para compartir decorativos y obsequios durante todo el año.
Dentro de la época decembrina, que es su punto fuerte, el mexiquense explicó que cuentan con una gran variedad de productos de vidrios para decorar no solo el árbol de navidad, sino, los hogares de las casas, contando con la venta de la esfera tradicional; la esfera redonda, y una variedad de figuras y personajes hechos en vidrio que sirven para obsequiar y tematizar los hogares.
Entre su producción, Pedro contó que, para este año su producción tuvo un crecimiento del 300% en comparación a su primera venta decembrina y, actualmente, su taller produjo alrededor de 160 mil esferas de las cuales 120 mil ya fueron comercializadas. De acuerdo con el mexiquense, 80% de las esferas hechas son del tipo tradicional que cuentan con variaciones en tamaños, texturas y colores. El otro 20% está dedicado a las esferas de figuras y objetos, donde el emprendedor y su grupo de artesanos crean desde adornos de mesa como frutas de vidrio u objetos decorativos, hasta las formas de vidrio que hacen alusión a personajes como Hello Kitty, Minnie y Mickey Mouse, el Come Galletas, o incluso unicornios. Los precios rondan desde los 3 pesos hasta los 120 pesos de acuerdo con los tamaños, figuras y decorados de cada producto.
En próximas temporadas, el taller mexiquense estará anunciando a través de sus redes sociales los decorativos que estarán realizando y comercializando para festividades como el día del amor y la amistad, el día de la madre, o la época de graduaciones escolares y universitarias: “Vamos a tener producto todo el año” expresó Pedro.
Los retos de crear algo nuevo
De acuerdo con el artesano, el emprender su proyecto artesanal ha sido una travesía de aprendizaje y creatividad que, si bien continúa desarrollándose, le ha generado una pasión por impulsar el sector artesanal y laboral de su municipio, sin embargo, no todo ha sido sencillo, pues, entre las dificultades, el artesano contó que actualmente están priorizando la trascendencia de su proyecto más que las ganancias y, con un ganancias a un nivel muy bajo, el taller está impulsando su trabajo y venta del producto con ventas a costos bajos para darse a conocer y en un futuro acrecentar el mercado del vidrio soplado en la entidad.
“En este momento, nosotros estamos sacrificando la utilidad por la introducción, y creo que lo estamos logrando, la gente nos está valorando el trabajo” afirmó Pedro.
Asimismo, el emprendedor contó que, como parte de su proyecto artesanal, “Tolontli” tiene la meta no solo de generar desarrollo cultural y empresarial en el Estado de México, sino, formar un espacio de igualdad y unión a través del vidrio soplado:
“Hoy ya saben que en Xonacatlán se está haciendo esfera y que se va a seguir haciendo esfera. Queremos desarrollar nuestro municipio de manera económica y le estamos ofreciendo trabajo especialmente a mujeres; a mujeres que necesitan una oportunidad de ingreso para sus casas. Cuando la mujer está decorando, toda su mente se va a la esfera, tanto, que nos generó una filosofía: cuando una de nuestras esferas llega a una casa, se va a convertir en hogar porque lleva todo nuestro cariño, toda nuestra dedicación. Nosotros conjuntamos el corazón con la mente.”
(Foto: Ivan Joatzay)
