El coronavirus humano no sólo ha traído consigo consecuencias en el sector salud, sino también en el económico, ya que se prevé que afecte el crecimiento de distintos países así como la dinámica de proveeduría a nivel mundial.
Miguel García Conejo
Visto desde una perspectiva local, China representa al momento el principal proveedor de la industria automotriz y la industria electrónica, ya que se reportan importaciones de ese país por más de 83 mil millones de dólares al año, por ello, Gilberto Sauza presidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales del Estado de México (Concaem) señaló que el hecho de que la exportación del gigante asiático se detenga o haga más lenta la entrada de mercancías puede significar un problema grave para las empresas locales.
Durante 2019, las relaciones comerciales entre nuestro país y el gigante asiático ascendieron a 90 mil millones de dólares que este año podrían disminuir de manera sustancial ante una limitación en la salida de mercancías desde China a México.
La situación, si bien alarma, apuntó, también es una ventana de oportunidad para que países que no han destacado o tenido una oportunidad de convertirse en proveedores de gran escala se afiancen en esta materia, México entonces podría desarrollar una nueva cadena de proveedores y ganar terreno en materia internacional.
“En diversas ocasiones desde el sector empresarial hemos destacado el dinamismo que tiene el país en temas económicos, hablar de agroindustria, del sector químico, el farmacéutico, aeronáutico y sobre todo el automotriz, es una prueba clara de la gran apertura que tenemos y de la necesidad qué hay de mantener la economía global”.
El índice de crecimiento de China pasó del 6.3 al 4 por ciento, lo que tendrá, de acuerdo con el líder empresarial un impacto macro y en el caso de México la caída en buena parte de los commodities (materias primas), principalmente el petróleo, cuyo precio no bajaba desde hace tiempo, y actualmente está en 43.72 dólares por barril, lo que podría afectar las proyecciones presupuestales para el Gobierno federal.
“Hoy el problema que vivimos en China, particularmente el virus que hoy lo ataca, de puede observar desde dos vertientes en México, la primera como una crisis importante y grave para poder obtener todos los suministros de materiales y bienes que se requieren para seguir apuntalando las industrias que se tienen en el país, y la segunda parte es la ventana que se abre para poder desarrollar como país emergente este nuevo comercio y con ello poder ser uno de los principales proveedores del mundo y un referente principal en el tema económico”.
En el caso del sector automotriz, apuntó, se tiene un plan de contingencia para la sustitución de importaciones de autopartes que podrían provenir de Estados Unidos o Canadá a través del TMec, pero es necesario que todos los sectores estén blindados de manera similar.
Al momento Hyundai, de Corea del Sur, ha suspendido su producción de automóviles debido a problemas con el suministro de piezas de su operación en China, una señal de advertencia temprana de una posible interrupción extensa en el futuro.
“No podemos dejar pasar otra oportunidad como la que se vivió hace seis años, en la cual se nos veía como un país importante en desarrollo, para generar toda la proveeduría. Hoy creo que por segunda ocasión se nos presenta y que es importante que hoy sí la aprovechemos al 100 por ciento”.
Finalmente, Sauza consideró que se necesitan políticas públicas con apertura total en temas económicos e industriales y, sobre todo, generar la confianza suficiente en el inversionista para que hoy, con esta gran ventana, se puedan desarrollar las industrias faltantes.
(Foto: Redes)
