Martha Romero 

Es urgente fortalecer el Estado de Derecho, simplificar trámites y garantizar condiciones que permitan acelerar la inversión productiva, pues la entidad está ante una oportunidad única para consolidarse como un polo estratégico de atracción de inversiones, así como retomar y ampliar su vocación industrial en buena parte del territorio, aseveró Mauricio Massud Martínez, presidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales del Estado de México (Concaem). 

Agregó que uno de los mayores retos que enfrentan las autoridades estatales y municipales es establecer un entorno de apertura real y de colaboración efectiva con el sector industrial, sensibilidad que reconozca que el desarrollo económico solo será sostenible si gobierno e iniciativa privada trabajan de la mano en la infraestructura y los servicios que hoy demanda el sector productivo.

Tras recordar que el Congreso del Estado de México analiza la Ley de Unidades Económicas que busca facilitar la apertura de negocios en los municipios, señaló que Concaem ha señalado que el Dictamen de Giro representa una barrera regulatoria innecesaria que debe ser eliminada porque su aplicación desde un inicio ha sido un error técnico que atenta contra los principios de mejora regulatoria y limita la competitividad de los negocios formales.

“Hoy la vocación industrial del Estado de México es una realidad en muchas de las regiones y municipios, hay oportunidades de desarrollo de empresas en materia logística, pero más aún de fuentes de empleo en sectores con mucho mejor nivel de remuneración y oportunidades de crecimiento para el personal, y para la generación de mejores condiciones de vida para la comunidad, y más que nunca necesitamos ser atractivos a la inversión”, resaltó.

Massud Martínez indicó que a nivel nacional el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) revelo que solo el 29% de los municipios ha implementado la Ley General de Mejora Regulatoria, promulgada desde 2018, falta de cumplimiento que impide contar con un entorno homogéneo, transparente y ágil para hacer negocios, particularmente en entidades clave como el Estado de México.

Refirió que en el caso de la entidad, si bien se ha mantenido entre los cinco principales destinos de inversión extranjera directa en el país, su potencial está lejos de aprovecharse plenamente porque las principales barreras que enfrentan los inversionistas incluyen marcos regulatorios poco claros, trámites excesivos y falta de certidumbre jurídica a nivel municipal.

Por ello, dijo, para revertir esta situación propuso eliminar el dictamen de giro en la Ley de Unidades Económicas, reducir en 50% los trámites gubernamentales y digitalizar al menos el 80%, así como crear una plataforma digital única con identidad digital (Llave MX) e integración de trámites.

Añadió que también es necesario publicar indicadores estatales accesibles para inversionistas nacionales y extranjeros, garantizar la existencia de reguladores técnicos e independientes con recursos suficientes, implementar la Ventanilla Nacional Digital de Inversiones, además de simplificar el funcionamiento aduanero para ampliar la capacidad exportadora del Estado de México.

Finalmente, señaló que la entidad, por su ubicación geográfica estratégica, su infraestructura logística y su masa crítica de industria manufacturera, tiene todo para posicionarse como un eje fundamental del nuevo modelo económico de México, potencial que solo será alcanzado si se generan condiciones claras, confiables y competitivas para la inversión.