Macrina Vázquez 

La familia de Guadalupe Bastida Reyes ha luchado por alcanzar la justicia en el Estado de México. Desde hace tres años busca que este caso de secuestro y feminicidio de Lupita, como la llaman madre y hermana, no quede impune.

La madre y hermana de Lupita han encontrado amenazas e indolencia de las instituciones, pues dos de los tres secuestradores están sentenciados a 95 años de prisión, y hoy buscan un amparo para reducir la condena.

"Es injusto ese amparo que han solicitado, Miguel y Dionisio, ya que pueden quedar libres y pueden tomar represalias contra nosotros que somos la voz de Lupita, de su hijo a nadie le deseamos lo que hemos pasado", señaló Régula Reyes.

Los imputados han pedido la reposición del juicio para que les reduzcan la sentencia y eso es injusto, después de que se les encontró culpables de los delitos del secuestro y feminicidio de Lupita, quien fuera raptada y asesinada el 15 de noviembre de 2021 en la comunidad de El Estanco, en Almoloya de Juárez. 

Lamentablemente los restos de Lupita fueron hallados seis días después en la localidad de Loma Blanca, pese a que la familia entregó un rescate, donde los culpables fueron detenidos y puestos a disposición del ministerio para determinar su situación jurídica.

"Los detenidos eran vecinos de Lupita, quien se dedicaba a atender la tienda de abarrotes de la familia a quien secuestraron y privaron de la vida, dejando a una familia sin Lupita", expresó Rebeca, hermana de la víctima.

Pese a las medidas de protección, las amenazas y acoso no cesaron; además de que los operativos de vigilancia son insuficientes, pues ha habido agresiones que ponen en riesgo la vida de la madre, hermana e hijo de Lupita.

La familia continuará gritando, manifestándose, pronunciándose hasta que los culpables purguen su condena y que el sistema de justicia haga lo conducente.

(Foto: Macrina Vázquez)