Derecho de Picaporte

Alfonso Godínez Mendiola

El líder nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, fijó su posicionamiento en su columna publicada en El Universal, respecto al controvertido tema de “la segunda vuelta”, de la cual se manifestó a favor calificándola de “necesaria” para la implementación de un mecanismo de elección popular que derive en altos niveles de legitimidad y de gobernabilidad”. Veremos cuál la reacción de los otros líderes de los partidos políticos y, sobre todo, de los gobernadores priístas… NOTAS CORTAS: Este fin de semana se “filtró” que el ex alcalde y ex diputado de Acolman, Darío Zacarías Capuchino, sería el otro designado por la cúpula tricolor mexiquense para ir de compañero de fórmula de Paulina del Moral para la dirigencia estatal del PRI. El peor escenario estaría por confirmarse mañana cuando ambos, que vienen de perder el año pasado la diputación local y la senaduría, respectivamente, se estarían registrando, a menos que, insistimos, sí se presente el dueño del membrete GPEM (que por décadas le han dado trato de sector siendo que no aparecen en los estatutos) Cuauhtémoc García Ortega, quien está en su legítimo derecho a aspirar, pero como no es el elegido de un solo hombre, lo dictaminarán “improcedente” por los candados que siempre se imponen en el priísmo mexiquense, como las firmas de consejeros (que la semana pasada Aguirre Romero ordenó a los delegados municipales ir a recabarlas a los consejeros políticos estatales y municipales con la amenaza de correr a quien no acatara la línea) y de los “líderes” de los sectores y las organizaciones que incluso llegan a firmar en blanco. Así, mientas a nivel nacional sí hubo de democracia interna porque la militancia votó, en el Edomex ocurre exactamente lo contrario, con la imposición y todas las arcaicas prácticas del viejo, pero muy viejo PRI. Así que llegará una dirigencia sin autoridad moral ante los militantes y ante las estructuras agachonas y levanta dedos. Con todo esto, Atlacomulco se aleja más de Toluca y se acerca demasiado Texcoco… Y hablando de los “cuadros” priístas del Valle de Toluca, qué raro que se queden calladitos en una actitud de “sí señor” ante el hecho de que, por primera vez, al menos en las últimas décadas, se rompa el tradicional equilibrio entre “los valles”, de México y de la capital mexiquense, que siempre iban de mancuerna en la presidencia y la secretaría general del Comité Directivo Estatal (CDE). El Valle de Toluca, con su capital y sus zonas rurales del norte y sur del estado, tiene como valor estratégico el “voto verde”, mientras el Valle de México que es la zona chilanga mexiquense por su zona metropolitana y el oriente de la entidad, tiene su importancia en el peso electoral, pues allá está la mayor parte del padrón. Del Moral Vela es de Cuautitlán Izacalli, uno de varios municipios conurbados a la vanguardista CDMX mientras Zacarías Capuchino es de Acolman, tierra rural de la región de “las pirámides”. Casualmente, Darío Zacarías (carismático y de trato amable y a quien tanto extrañan los delegados que lo tuvieron de jefe como Secretario de Organización y le aplaudían más que a Paulina y después a Nemer) era el más mencionado tras la salida del nefasto Nemer, y en este espacio lo comentamos, había esperanza en la militancia, pero sorpresivamente designaron a Paulina Del Moral que venía de una estrepitosa derrota para el Senado de la República, quedando no en segundo sino en tercer lugar, y un año antes, en la elección de gobernador, siendo ella presidenta del CDE por primera vez, tricolor perdió por primera vez la gubernatura al ser superado por la Maestra Delfina Gómez Álvarez, quien final y oficialmente perdió, pues PNA y PVEM le sumaron votos al PRI y solo así lograron superar a Morena, pero el PRI perdió bajo la presidencia de ella, de Del Moral. Otro dato curioso es que entre Paulina y Darío se disputaron y repartieron las organizaciones juveniles estatales. En fin, veremos si todo se confirma mañana, en esta crónica de un dedazo anunciado… Feliz inicio de semana, raza…