Leobardo Hernández

 La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo firmó un decreto que protege a la industria textil mexicana ante la importación abusiva de algunas empresas bajo condiciones irregulares que ponen en desventaja al comercio de estos productos y la generación de empleos en el sector. Con esto busca erradicar la competencia nacional y fortalecer la producción nacional. 

Para fortalecer el desarrollo industrial mexicano y fomentar la competencia justa, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard Casaubón, anunció medidas que ponen límites a las importaciones, pues algunas empresas las realizan de forma truculenta que afecta la producción nacional, con énfasis en el sector textil, lo que ponen en jaque la generación de empleos y emprendimientos.

Durante la mañanera del pueblo de este jueves, el exjefe de gobierno de la Ciudad de México señaló que, por instrucciones de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, se impondrá un arancel temporal del 35% a 138 fracciones productos confeccionados, y del 15% a la importación 17 fracciones de mercancías textiles; no obstante, estos no tendrán efecto en los productos de los países con los que se tiene libre comercio.

En este aspecto, Ebrard destacó que “estas medidas tienen como objetivo evitar que se abusen de disposiciones vigentes en contra de la industria textil mexicana, es una industria muy importante simplemente por el número de empleos, son prácticamente alrededor de 400 mil empleos”. 

Otra medida es el aumento de la lista de los productos que no se pueden importar, a través del programa de la Industria Manufacturera, Maquiladora y de Servicios de Exportación. Ésta buscará que las empresas que traen productos a México no “engañen”, pues las mercancías que pretenden vender como productos terminados, las importan como si fueran piezas no concluidas para integrarse a un producto que se va a exportar.

“Hay empresas que nos dicen ‘voy a importarlo para eso’, y no es verdad, lo venden aquí”, explicó. Apuntó que, de acuerdo con la legislación de importaciones, los productos que entran como parte de un proceso industrial y no como uno terminado, no pagan impuestos, por lo que, de manera tramposa, utilizan este pretexto para vender en el país dichas mercancías más baratas que las hechas en México. “Es una puerta que vamos a cerrar”, determinó Ebrard.

Al respecto, señaló que uno de los estados con mayor afectación por estas artimañas es el Estado de México, primer productor de textiles a nivel nacional, seguido por Puebla, Hidalgo, Coahuila y Guanajuato, que han perdido 79 mil empleos en los últimos años, y en 2024 registraron el nivel más bajo de puestos laborales.

 Con esta base, aseveró que dichas medidas fomentarán el desarrollo de la industria nacional, condiciones justas del mercado; se eliminarán prácticas que afecten la creación de empleos, se evitará el contrabando técnico, se privilegia el mercado con los países socios de México en tratados de Libre Comercio y aumentará la competitividad y la generación de empleos.

Tras la exposición del secretario de Economía, la presidenta Claudia Sheinabum Pardo firmó el decreto que pone en marcha las medidas que fortalecerán al sector textil mexicano.  

(Foto: presidencia)