Leobardo Hernández
El Plan Nacional del Agua del gobierno de Claudia Sheinbaum buscará revertir los efectos de un sistema extractivista y privatizador impulsado por el modelo neoliberal que redujo gravemente el acceso al agua, explicó la secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Alicia Bárcena en la mañanera del pueblo de este jueves.
La funcionaria enfatizó que este será un esfuerzo histórico para complementar el programa de rescate al agua emprendido por el expresidente Andrés Manuel López Obrador durante el sexenio pasado. En el Segundo Piso de la Cuarta Transformación, se contempla la restauración de humedales y el saneamiento de los Ríos Lerma, Atoyac y Tula con el fin de que la recarga del vital líquido regrese paulatinamente a su estado natural y se garantice el abasto a la ciudadanía de todas las regiones del país.
“Creo que esos 3 proyectos van a ser históricos en este periodo gubernamenta y, sobre todo porque, sin duda, se trata de tener una visión integral del agua que nos permita, por un lado, preservar este valioso recurso y, por otro lado, también hacerlo tanto con la colaboración del sector privado, del sector social”.
Al respecto, Julio Berdegué, Secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdegué, expresó que con este programa habrá una tecnificación inédita de zonas de riego, “nuestra estimación es que en esa superficie tecnificada podemos aumentar nuestra producción en 51%, entonces esto no sólo contribuye al derecho humano al agua, sino que también es una formidable contribución a la soberanía alimentaria de la nación [...] No sólo será una revolución en el uso del agua eficiente, sino que también será una revolución en la producción agropecuaria de México”.
En este contexto, el director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) detalló que el Plan Nacional Hídrico se sustenta bajo 4 ejes: Justicia y acceso al agua, gestión integral y transparente, mitigación del impacto ambiental y adaptación al cambio climático y soberanía nacional.
Destacó que la devastación y saqueo del agua inició en el sexenio de Salinas de Gortari, cuando en 1992 se detonó el otorgamiento indiscriminado de concesiones que en sólo 10 años (hasta 2002) fueron otorgadas 360 mil; mientras que en los 75 años anteriores sólo se habían conferido 2 mil 600, lo que impactó dramáticamente en el acceso al vital líquido.
Explicó que en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador iniciaron los planes de justicia hídrica, sobre todo a favor de las naciones originarias, que habían sido las principales afectadas por la rapacidad neoliberal.
Para reforzar estos esfuerzos, Morales apuntó que se revisan los títulos de concesión para constatar su pertinencia, con el objetivo de reincorporar a las aguas nacionales las que no estén siendo utilizadas por particulares; es decir, que se hayan adquirido con el mero propósito de la especulación.
También se creará el registro Nacional de Agua para el Bienestar para garantizar total transparencia y cero corrupción en la gestión de este recurso. A esto se suma un plan nacional de inspección y denuncia de irregularidades, por lo que llamó a las y los mexicanos a denunciar cualquier irregularidad en el correo denunciaciudadana@conagua.gob.mx
Igualmente se buscará la reforma a la Ley de Aguas Nacionales y la expedición de la Ley General de Aguas para que se termine con el mal uso de las concesiones agrícolas, miomas que se usaban para favorecer a grandes empresas con la extracción desmedida para el lucro, lo que va de la mano con la especulación referida anteriormente.
“Vamos a defender el agua que le pertenece al pueblo”, sostuvo. Bajo esta premisa, abundó que se creará un sistema digital para los trámites relacionados con este sector con el fin de simplificarlos y garantizar su completa legalidad.
En relación con el proyecto agropecuario, precisó que el gobierno de la presidenta Sheinbaum tecnificará 200 mil hectáreas de riego, “esto va a beneficiar la economía de más de 225 mil familias productoras, y también a todo el pueblo de México porque vamos a producir más alimentos con menos agua [...] parte del agua que recuperemos va a ser destinada para consumo humano y para la recarga de nuestros acuíferos”.
Igualmente explicó que se trabaja en un plan maestro de infraestructura hidráulica con la meta de mejorar la existente y construir la faltante en conjunto con los gobiernos estatales y municipales, “es un programa sin precedentes, nunca se han mezclado los recursos, nunca se ha establecido un plan maestro. Esto nos va a permitir tener una gestión, que no solamente resuelva las problemáticas de manera inmediata sino que tengamos un plan para los siguientes 30 años”.
Finalmente, expuso que se concretó el Acuerdo Nacional por el Derecho Humano al Agua y la Sustentabilidad, donde distritos de riego, así como empresas del sector privado se comprometieron a destinar el volumen de agua que no utilizan para la dotación de otros sectores, principalmente el civil, mismo que en primera instancia logró comprometer la retribución de 2,500 millones de metros cúbicos, lo que significa la dotación de 2 años para la Ciudad de México.
Por su parte, la doctora Claudia Sheinbaum Pardo sostuvo que en este esquema, “el agua deja de verse como una mercancía, y se reconoce como un derecho: esa es una de las esencias del Plan Nacional Hídrico; se deja atrás la visión neoliberal”.
(Foto: captura de pantalla)
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