Aranxa Solleiro
El viernes 13 de agosto, a las nueve de la noche, una gama de seres extraordinarios -entendido en el mejor sentido- se decidió a gozar de una noche de festividad, pausando la catástrofe pandémica, incesante hasta la fecha.
El propósito: atender el concierto celebratorio de los quince años de música reproducida por la voz rockera de Javier Blake, los golpeteos estrambóticos de la batería de Kiko Blake, los dedos penetrantes en el teclado de Rodrigo Monfort y las guitarras eléctricas y bajo de Ricardo Pérez, Alejandro Luque y Efrén Barón.
Nueve de la noche con treinta minutos, los gritos impactaban en cada asiento del representativo Teatro Morelos. Mil 200 asistentes magnificaron la luz emitida por los reflectores rojos, azules, blancos y anaranjados impresos en el escenario.
La primera canción electrizó al compás de los acordes de las guitarras. “Felicidades por quince años compartidos con División Minúscula, esta es su fiesta, Toluca. Ustedes siempre nos han hecho sentir en casa.” Vocalizaba por el micrófono Javier, portando un atuendo característico de su personalidad: camisa, pantalón y botas negras.
El público enloquecía cada que pronunciaba una palabra, al mismo tiempo que las caretas cubriendo los rostros de fanáticos, se empañaban por el irremediable calor y la adrenalina de tener por fin frente a sus iris, a su banda favorita desde aquel primer sencillo: “Sognrare”, la cual Blake aseguró, les hizo no solo alcanzar el estrellato, sino también, les impulsó a salir de su zona de confort para ser lo que son hoy día.
Con duración de una hora y media, los asistentes permanecieron de pie como el amor y agradecimiento a su banda favorita desde 2006. Cantaron sin equivocación identificable, las 12 canciones del álbum “Defecto Perfecto”, incluidas cuatro canciones diversas a éste, no obstante, igual de infestas en emoción en las gargantas cubiertas con cubrebocas de los seguidores, quines a pesar de vivir el primer concierto de sus vidas inmersos en un mundo inundado de Covid-19, reventaron de alegría.
Es viernes, son cinco para las once de la noche, aún con el número supersticioso en jerarquía, temores sanitarios y tormentas avasallantes, División Minúscula celebró -exitosamente- sus XV años musicales en la capital del Estado de México, su adoptado hogar.
(Foto: Aranxa Solleiro)
Categoría: Nacional |
Etiquetas:
No hay etiquetas asociadas a éste artículo. |
Vistas: 55 |