2021-06-28-confesiones-de-turista-libertad-lgbttiq

Confesiones de turista/ Libertad LGBTTIQ

Aranxa Solleiro 

“Por homofobia no se entiende las antipatías o las desconfianzas o los recelos morales que los gays suscitan, algo inevitable por enraizado y de muy difícil eliminación incluso entre los propios gays, sino la movilización activa del prejuicio, la beligerancia que cancela derechos y procede a partir de la negación radical de la humanidad de los disidentes sexuales”. 

  • Carlos Monsiváis  

Nació en Veracruz, también en el Estado de México y en la Ciudad de México, cada uno de ellos camina sintiéndose preso a los cinco años, los silencios ensordecían sus oídos, preferían enrollar sus brazos cual largos son para sentirse protegidos por ellos mismos, afuera, todo parece una orbita descomunal, poco armoniosa ante sus sentidos. Los sentidos que inundan de amor sus venas, sus latidos y su alma.  

Pasando los días, su mente se disuelve entre sombras e ídolos inalcanzables, “¿cómo es que él lo logró?” Pensaba recostado en la almohada, húmeda por un derrame lacrimoso difícil de controlar cada nocturno. Sale de día convencido de que por fin, encontrará ese valor injusto de fraguarse en su pecho libertad, de ser, de vivir, de respirar y amar.  

Xavier, Samuel, Alfredo, Gustavo, Daniel, los nombres son inservibles, son humanos, como aquel que levanta un dedo y los apunta como queriendo lanzar una bala penetrante y fulminante. Llegan los 17 años, es momento de elegir un camino para invertir un futuro esperanzador de desencadenar los eslabones que fueron acumulándose al pasar de los años. Elige uno de ellos la carrera en turismo, y por sorpresa, encuentra una matricula digna de provocarle un gesto sorpresivo, pues del 100 % de los inscritos, el 68 % o seguramente el 70 % pertenece a su mundo, a uno que -sin saberlo- es el mismo de todos.  

La dadivosidad de la profesión elegida, le parecía una bandera destellante de colores, los amarillos, morados, azules, anaranjados se presentaban en cientos de mentes brillantes, por primera ocasión la inclusión parecía cobrar un sentido práctico, siendo lo único considerado el talento y el intelecto de cada uno de los compañeros.  

En la formación de sus cinco años facultativos, le pedían en todo momento, crear fascinantes proyectos a través de los cuales se proyectara una diversidad de género, sus ideas eran formidables, tan es así que lo llevaron diez años después, a ser el director de la primera organización de hospedaje especialmente para personas LGBTTIQ. Lo recuerda como si fuese ayer, cuando se alzó la bandera en el destino mexicano más visitado por ellxs: Puerto Vallarta.  

Se sintió libre como cuando veía las revistas donde aquellos ídolos parecían las personas más fuertes del planeta, sonreía como nunca pudo hacerlo, especialmente cuando corría a los siete años para protegerse de los niños que le perseguían con la intención de apedrearlo. Lo supo desde entonces, el turismo le inyectó una vida que desea ahora reflejarla a quienes como él, viven con temor de nunca lograrlo y sentirse por fin, ellxs mismxs.  

El destino lo puso en un camino diverso, su ascenso como dueño de una cadena hotelera le motivaron a cambiar de residencia en la urbe más poblada del país, cerca de Polanco, la zona de mayor tendencia de comunidad LGBTTIQ le esperaba con los brazos abiertos, obteniendo por fin, el abrazo que él mismo debía de darse cuando niño.  

Resuenan en las noticias del matutino, “se han presentado hasta el mes de junio de 2021, 35 casos de homicidio a personas LGBTTIQ”, se desglosa cual cascada de lamentos a través de la voz del periodista televisivo: “en número referente a grupos homosexuales se han registrado 9, para lesbianas han sido 4, bisexual 1, mujeres trans 14 y sin identificar han sido 7. Juntos suman la cantidad de 35.” Se abruman sus pupilas con un desconsuelo estremecedor, desea salir corriendo de donde vive, a sabiendas de que en cada recoveco de la República la situación es la misma.  

El turismo es inclusivo, con evidencia, el sector cada vez abarca más población de género para satisfacer sus necesidades, gustos, preferencias y permitirles una libertad de ser, no solamente de expresión, empero, el odio, el rechazo hacía ellos, persiste como virus pululante del presente.  

El Observatorio Nacional de Crímenes de odio contra personas LGBT, demarca día a día la magnitud de la problemática, él ha sido nombrado para coordinar los espacios de Baja California, Morelos y Estado de México, siendo los primeros tres lugares nacionales con mayor número de homicidios, de acuerdo al portal estadístico mencionado. Se detiene a pensar, le embriaga un sentimiento de angustia causante de apnea en sus bronquios. Estudio la licenciatura con mayor inclusión, sin embargo, el campo laboral, incluso después de diez años de su titulación, continúa siendo uno de batalla y peligro.  

¿Hasta qué punto se seguirá mencionando a la palabra “inclusión” en tendencias turísticas, en campañas políticas y en grupos sociales, sin el conocimiento profundo de su significado y auspiciar a erradicarlo? Me remito a Monsiváis: “la beligerancia que cancela derechos y procede a partir de la negación radical de la humanidad.” 

Confesiones en: Instagram: @arasolleiro, Twitter: @aranx_solleiro y aranxaas94@gmail.com 


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Nacional
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