Al considerar el uso del cubrebocas como mecanismo de prevención ante el contagio por SARS COV 2 es fundamental pensarlo como un artículo de protección no sólo para sí misma, sino para los demás también.  

Ximena Barragán  

A decir del doctor  Miguel Roberto Gutierrez, la barrera física provista por el accesorio médico reduce en casi un 95 por ciento la dispersión de partículas contaminantes expulsadas al hablar, toser y estornudar.  

Desde desechables, hasta KN95 , las mascarillas protectoras pueden garantizar la disminución en la transmisión de contagios de manera segura, sin embargo, aquellas elaboradas con distintos tipos de tela pueden reducir la efectividad en el principio de barrera “algunas telas pueden ser más rígidas y otras más débiles”.  

Entonces, ¿cómo saber que cubrebocas utilizar?  

El coordinador de la campaña “Así se usa” del Consejo de la Comunicación explica que “un buen cubrebocas es aquel que cubre desde el borde inferior donde terminan los ojos (puente nasal) y que llega hasta la barbilla, cubriendo de mejilla a mejilla”, características con las  que cumplen aquellos de  tela de algodón,  desechables y mascarillas KN95. Para cada uno de los cuales habrá de considerar elementos como vida útil, higiene y durabilidad.  

Tela 

Deben ser preferentemente de algodón y lavarse diario con agua y jabón  

Desechables 

Tienen una vida útil de 8 horas (considerando uso seguido), puede ser guardado en recipiente hermético o bolsa de plástico hasta cumplir su vida útil.  

KN95  

Debe ser desinfectado con solución sanitizante aplicada a 5 cm de distancia o colocado directamente al sol durante 8 horas. (Alcanzará a ser efectivo hasta por una semana)  

En cuanto a las variaciones que actualmente encontramos en el mercado accesible a la población, el experto explicó lo siguiente:  

Válvula  

Facilita la expulsión del dióxido de carbono. Para comprobar la calidad de la válvula (que cumpla su función adecuadamente y haya sido colocada a modo de “adorno”), el usuario debe comprobar que sea colocada sobre un cubrebocas KN95 3M,  ya que son estos los que reciben válvulas de proveedores autorizados. “Podría casi asegurar que las que colocan en los cubrebocas de tela no es funcional o podría ser sólo un adorno".  

En relación a la expulsión del dióxido de carbono y la preocupación generalizada por esta necesidad al hacer ejercicio, Gutierrez explicó “Si la gente siente que no respira bien puede ser porque no se coloca bien y se dificulta la respiración (...) no hay pretexto, no obstruye, funciona”, recordó que específicamente en los gimnasios, que son ambientes cerrados y con aire acondicionado su obligatoriedad debe ser “muy estricta", mientras que al aire libre, podría evitarse , siempre y cuando se respeten todas las demás medidas. “Respetar el 1.5 mts de distancia y no estornudar, toser , escupir ...".  

Caretas  

Si bien un importante sector de la población ha optado por el uso de caretas como alternativa al cubrebocas, por la comodidad que representa, en entrevista para portal, el doctor aclaró que esta no es una medida suficiente, pues aunque la careta pudiera proteger a quien la porta, no evita que la persona transmita partículas. Su uso debe ser complementario y no sustituto.  

Respeto a las demás medidas  

Como tantas veces escuchamos decir al subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López Gatell, el uso de cubrebocas cumple con una importante función pero no actúa por sí sola , sino que es necesario continuar respetando las medidas de lavado y desinfección de manos y respeto a la distancia de 1.5 metros , para poder prevenir el contagio de manera efectiva.  

(Foto: Especial Portal / Web)