“Estoy harta de escuchar una y otra vez que escribo como hombre… como un elogio a lo que consideran una escritura despojada de la “afectación femenina”. Elma Correa, “ia estoy arto”, nota al cuento "Marea Verde”, Grafógrafxs l vol. 2 núm 1l enero-marzo 2020
Ximena Barragán
Aunque, por la naturaleza propio de nuestro desarrollo social, las mujeres tienen una perspectiva distinta, esta no necesariamente debe ser aquella que permee en sus escritos: “las mujeres tienen una perspectiva distinta que se puede plasmar o de la cual se pueden deslindar (con otra voz)”, explicó la escritora feminista Karla Michelle Kanet.
“Escribo desde mi contexto, pero también puedo construir otros personajes, darles una voz y hacerlos actuar en consecuencia, según el texto requiera”, reafirmó Elma Correa.
Al ser cuestionadas respecto a la distinción de una “voz femenina” en la literatura: ambas coincidieron en las múltiples posibilidades de la escritura, en cuanto a la construcción de personajes y presentación de perspectivas.
Independientemente de las licencias narrativas y poéticas y las perspectivas manifiestas, lo que es innegable, desde la experiencia de las autoras es que, en materia de publicación y gestión de las letras, aún existen evidentes diferencias.
A pesar de que existen cuotas de género, “el trasfondo de porqué es más fácil publicar para un bato que para una morra va más allá … desde un contexto familiar, desde la casa, las oportunidades que las mujeres tienen para muchas cosas”.
“Hay una clara preferencia por la escritura masculina… una mujer, así sea la más privilegiada siempre va a estar en desventaja frente a un hombre. Ellos tienen más comunidades, más tiempo libre, pueden acceder a otras cosas y esas condiciones hacen que siempre lleguen antes que nosotras".
Desde los fallos de los jurados en los certámenes literarios, hasta los puestos que nos son “otorgados” en las instituciones culturales, o de cualquier índole, hasta la cantidad de trabajo que se exige a las mujeres por el mismo sueldo que el de un hombre, la inequidad sigue siendo innegable.
Ante dicho panorama, desde el gremio literario, desde el periodismo, desde cualquier trinchera queda a las mujeres seguir luchando, denunciando lo que sucede “seguir escribiendo, hacer un chingo de lio, tejer redes, hacer comunidad, presionar…”, sentencia Correa.
Las autoras procedentes de Mexicali visitaron el Taller de Narrativa de la revista Grafógrafxs (dirigido por Alonso Guzmán), en cuya sesión del pasado sábado dieron lectura a sus textos, compartieron experiencias y defendieron la postura feminista y lucha desde la escritura.
(Foto: Ximena Barragán)
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