• A los inmigrantes en Chiapas una patada, a Evo Morales las llaves de la Ciudad de México  
• Juan Rodolfo Sánchez Gómez, entre aplausos y reclamos  

José Luis Rodríguez

Que día se vivió el pasado martes en México, la controvertida y no bien aceptada llegada de Evo Morales al país; el enfrentamiento por la imposición artera y ventajosa de Rosario Piedra Ibarra, a quien no le importó la manera de cómo llegó a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH); el enfrentamiento entre Policías Federales y de la Ciudad de México, donde los primeros se manifestaron cerrando los accesos al AICM, en demanda de sus derechos de no querer formar parte de la Guardia Nacional.  

Destacados columnistas escribieron su opinión de estos temas en sus respectivos espacios en los medios correspondientes; de algunas plumas prominentes hubo comentarios como que el Gobierno Federal utilizó un avión Grumman 5.5 que fue de la Presidencia de la República asignado al EMP, (que dicen ya desapareció, sin embargo se les vio ayer con un fuerte dispositivo para mover a Evo Morales a sus respectivos compromisos), la recepción fue en el otro hangar presidencial utilizando un helicóptero militar para trasladarlo.  

Hubo otras menciones, como la forma del empiezo de Rosario Piedra, cuya presidencia nace con inequidad, inconformidades, empujones, enojos, mentadas y con cuestionamientos de su legalidad; si a esto se le suma su inocultable adhesión con Morena y su admiración y veneración profesa por el Mandatario Federal, será un cuanto difícil que un apellido familiar tan respetado y reconocido por su reconocida lucha histórica en favor de los desaparecidos y los derechos humanos, hoy pueda cuestionarse ese mismo prestigio a la responsabilidad de Rosario como ombudsperson Nacional. Ahora sí como dicen por ahí, se topará con Piedras en el camino, tan grandes como su apellido para lograr sacudir la ilegalidad a ojos vistos y poder recuperar su imagen como responsable de la CNDH.  

En el tema bochornoso de los policías, hay que decirlo, es una parte más de las imposiciones del actual gobierno federal, con tratar de obligarlos a ser parte de la Guardia Nacional (GN) y ser cambiados a otros estados del país. En la realidad este gobierno ha sobajado a la Policía Federal, que, a pesar de sus múltiples problemas y carencias, era catalogada como la mejor corporación policíaca de todo México. Los han degradado y humillado, hay que recordar que hace poco tiempo les entregaron insumos insultantes, se sienten discriminados, señalados frente a los militares quienes son los que tienen el liderazgo en la conformación de la Guardia Nacional.  

En el sexenio de Felipe Calderón se les hicieron varios ofrecimientos de mejoras tanto laborales como familiares, fueron bastantes los que ingresaron a la corporación por tan atractivas prestaciones; hoy el gobierno Federal les cambió la estrategia y eso es una de las causas de sus molestias, aparte de su negativa total a formar parte de la Guardia Nacional. Estos temas mencionados que acaparan los reflectores, mediáticos, nacionales e Internacionales, no logran que se olviden los últimos acontecimientos lamentables de inseguridad y desempleo que vive y sufre diariamente el país.  

El alcalde de la ciudad de Toluca, capital del Estado de México, el ahora morenista, antes panista, Juan Rodolfo Sánchez Gómez fue testigo de la boda comunitaria de 194 parejas que se dieron cita en la explanada del zócalo de los Mártires, donde dijo "La familia es el bien más preciado que tenemos como personas y como miembros de una comunidad; la familia nos forma en el respeto, la solidaridad y la decencia".  

Ahí mismo, manifestantes exigían obras públicas y espacios para el comercio ambulante, luciendo mantas con leyendas de "Morena No cumple", incluso intentaron boicotear las bodas. Los manifestantes pertenecen a la organización de Antorcha Campesina, quienes amenazaron que de no haber solución a sus demandas "como ya es su costumbre", continuarán con sus movilizaciones y reclamos.

(Foto: Redes)