Orlando Salinas Cesáreo 

La Unión Industrial del Estado de México (UNIDEM), reconoció que el aumento del 13 por ciento al salario mínimo para el 2026 es razonable y suficiente para que los trabajadores hagan frente a la inflación, no pierdan poder adquisitivo y recuperen el terreno perdido.

Francisco Cuevas Dobarganes, director general de la agrupación, dijo que el aumento del 13 por ciento al salario es adecuado dado que si fuera menos se cumple con la política pública de la 4T de recuperar el poder adquisitivo y si hubiera sido más alto hubiera perjudicado a la planta productiva.

Recordó que hace unos siete años empezaron los incrementos al sueldo mínimo en dos dígitos, el cual ayudó a los trabajadores a mejorar su poder de compra y el consecuente efecto de inflación fue prácticamente imperceptible.

Alertó que las empresas han tenido una carga adicional laboral importante empezando por las vacaciones dignas y el incremento en el impuesto sobre remuneraciones.

Señaló que existen otras propuestas que buscan incrementar el aguinaldo y otras prestaciones, además de la propuesta de que las horas laborales vayan paulatinamente disminuyendo de 48 a 40 horas en un término de 4 años.

Es por ello que reconoció que el aumento del 13 por ciento al salario mínimo para el 2026 es razonable y suficiente para que los trabajadores hagan frente a la inflación, no pierdan poder adquisitivo y recuperen el terreno perdido.

Apuntó que si el sueldo hubiera aumentado de entre un 15 y 20 por ciento más, principalmente resultaría afectados los giros que pagan sueldo mínimo y donde la mayor percepción es por concepto de propina.

El empresario indicó que si hubieran continuado los aumentos a razón de 20 por ciento anual, además de generar un problema inflacionario, se pondría en riesgo la viabilidad de muchas empresas formales.

“Siempre estaremos de acuerdo en mejorar las condiciones laborales; sin embargo, tantos incrementos en tan poco tiempo, sí pueden poner en aprietos a algunos sectores como el industrial” 

“En los últimos años se ha incrementado de una manera importante la proporción de personas que trabajan en la economía informal y ello está relacionado con los costos laborales, restricciones, aranceles, regulaciones y todo lo que tiene que pagar la empresa para poder generar empleos formales. Cada vez más, se está alentando a que se contraten a los trabajadores por fuera o que de plano la empresa trabaje en la informalidad”, dijo.

Por último dijo que es importante recordar que los trabajadores ya no valoran la opción de emigrar a Estados Unidos, debido a las restricciones impuestas en ese país, sin embargo dijo que es necesario que en México se debe ofrecer opciones formales de empleo bien remunerado, para salir adelante.