Leobardo Hernández
“Así son los fachos”, expresó el presidente Andrés Manuel López Obrador, luego de que el gobierno ecuatoriano declaró “persona non grata ” a la embajadora mexicana en ese país, y se dio cuenta de que la policía de esa nación cercó la sede diplomática para Presionar a que México desista el refugio al exvicepresidente del gobierno correísta Jorge David Glas Espinel, albergado en ese recinto.
Pese a las hostilidades del régimen ecuatoriano del presidente Daniel Noboa contra el gobierno de la Cuarta Transformación, al expulsar a la embajadora Raquel Serur, el mandatario mexicano refrendó, en conferencia de prensa matutina de este viernes, que “nosotros no vamos a romper relaciones ni vamos a hacer lo mismo con el embajador de Ecuador”.
En este aspecto, el tabasqueño defendió la integridad y preparación de Serur, “que además es una gente excepcional, una intelectual de primer nivel, de la UNAM, filósofa, compañera de un gran filósofo, Bolívar Echeverría, él ecuatoriano, con una gran trayectoria. de lucha social. Y a Raquel la queremos mucho, y es una mujer íntegra, con ideales, con principios”.
En este contexto, informó que una aeronave de las Fuerzas Armadas asistirá para repatriar a la ahora exembajadora “porque le dieron 72 horas para que abandonara Ecuador, entonces hoy va a salir un avión a traerla”.
Respecto a la presión que ejerce la policía ecuatoriana con el cerco a la embajada mexicana, explicó que el exvicepresidente Jorge Glas, segundo al mando durante el gobierno de Rafael Correa, fue preso bajo el señalamiento de corrupción y, tras pagar su sentencia, el actual El gobierno ecuatoriano activó un nuevo proceso en su contra, mismo que tiene más un tinte ideológico al ser un personaje del movimiento progresista. “Entonces decide irse a nuestra embajada en busca de protección y de asilo, y ahí está el vicepresidente”.
En este sentido, agregó que el gobierno de Noboa buscaba “que nosotros lo entregáramos, y nosotros no podemos hacer eso porque México tiene una política exterior caracterizada por la protección a perseguidos y por el asilo. Aquí en este país se le dio protección a ecuatorianos, a chilenos, a argentinos, a bolivianos, de todo el continente, cuando las dictaduras; incluso se le salvó la vida a chilenos que acudieron a la embajada de México en Santiago, que estaba llena de perseguidos que los querían asesinar los militares cuando el golpe encabezado por Pinochet”.
Manipulación en elecciones, el enojo de Noboa
Durante la mañanera del 3 de abril AMLO señaló que hubo una posible manipulación tras considerar sospechoso que la candidata presidencial ecuatoriana perdiera los 10 puntos de popularidad sobre sus adversarios, tras el asesinato del candidato Villavicencio, hecho que favoreció al hoy presidente y empresario, Daniel Noboa (hijo de el hombre más rico de Ecuador).
Al respecto, López Obrador no titubeó en expresar que la decisión ecuatoriana de expulsar a la diplomática mexicana obedeció a que “hice referencia a lo que considero fue un acto de manipulación en el proceso electoral pasado en Ecuador”.
Confirman asilo político a Jorge Glas
Tras la exposición de estos hechos, Andrés Manuel López Obrador instruyó a la titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Alicia Bárcena, a fijar una postura oficial. Horas más tarde, la SRE oficializó el asilo político al exvicepresidente ecuatoriano.
“Luego de un análisis exhaustivo de la información recibida, el Gobierno de México ha decidido otorgar asilo político al señor Jorge David Glas Espinel, quien actualmente se encuentra en la Embajada de México en Quito, lo cual será comunicado oficialmente a las autoridades ecuatorianas junto con la solicitud de que concedan el salvoconducto respectivo, de conformidad con la Convención de Asilo Diplomático de 1954, tratado internacional del que México y Ecuador son Estados parte”, se lee en un comunicado emitido por la dependencia.
En cuanto al hostigamiento sobre la embajada mexicana, fijó la siguiente postura: “el Gobierno de México rechaza el incremento de la presencia de fuerzas policiales ecuatorianas afuera de la Embajada de México en Quito, la cual, según declaraciones de autoridades del Ecuador, es una medida de rechazo e inconformidad por declaraciones de autoridades mexicanas. Esto constituye un claro hostigamiento a su Embajada y una flagrante violación a la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas”.
(Foto: presidencia)
