Ivan Joatzay
La tarde de este miércoles, integrantes del colectivo ‘Haz Valer mi Libertad’ (HVML) encendieron “la llama de la resistencia” como petición a los antiguos dioses prehispánicos por la justicia para sus familiares injustamente presos.
En compañía del Consejo Indígena del Trueque, la agrupación de madres y hermanas de personas privadas de su libertad realizaron una ceremonia simbólica donde, a través del encender de una fogata frente a las instalaciones de Palacio de Gobierno, solicitaron a los dioses su escucha para resolver los casos de necesidad de amnistía que continúan sin ser atendidos por el Poder Judicial del Estado de México (PJEM) y el gobernador, Alfredo del Mazo Maza, a quien el grupo exhorta al dialogo desde hace casi 4 semanas.
“Es el poder expresar ante Dios nuestra necesidad de justicia y el dolor de nuestro corazón, porque lo hemos expresado ante un humano, y el humano, aunque tiene oídos, no oye, aunque tiene ojos, no ve”, afirmó Leydi Plácido, vocera de HVML.
El ritual, conocido en algunas regiones como “la ceremonia del fuego ancestral”, es una tradición datada de aproximadamente mil años antes de Cristo y consistió en realizar una veneración hacia los dioses de los elementos naturales por medio de los 4 puntos cardinales: este (fuego), sur (agua), oriente (tierra), norte (aire).
La ceremonia, con duración de poco más de media hora, reunió a decenas de integrantes de ambos colectivos para dirigirse al Ipalnemohuani, dios de los aztecas, y, además de agradecer el bienestar alimenticio con alimentos colocados a lo largo del ritual, solicitó la libertad simbólica de las mujeres en lucha, antelando un buen augurio por sus familiares situados en distintos penales de la entidad mexiquense y la república mexicana.
Entre sus simbolismos, se destaca la parte centro del ritual, donde se encuentra la flama, como la representación viva de la mujer:
“Hicimos un círculo, el rezo fue en círculo, porque nadie vale más ni nadie vale menos. Es el hecho de que el respaldo hacia la madre tierra y hacia la mujer es más grande, porque ellas son el vaso divino de la vida que Dios porta para nosotros” explicó el Quiahuitécatl, guardián de la lluvia e integrante del Consejo Indígena del Trueque.
Dentro de su lucha se señaló que, además de la solidaridad entre ambas causas sociales, se solicitó el apoyo al consejo indígena para visibilizar la necesidad de aprendizaje y replica de las tradiciones ancestrales dentro del Estado de México.
A través del movimiento, denominado “encendiendo el fuego de la dignidad”, las mujeres en lucha cerraron la avenida Sebastián Lerdo de Tejada por más de una hora y volvieron a exhortar el dialogo con el dirigente de la entidad, recalcando que están a punto de alcanzar el mes de plantón sin ser atendidas.
(Foto: Especial Portal)
