Un estudio sobre la situación de la diversidad de género en México, elaborado por McKinsey & Company y publicado en la segunda edición de Women Matter MX, refleja que el 74 por ciento de las empresas consideran la diversidad de género como un tema prioritario en sus agendas. Por lo que vale la pena valorar el avance que ha registrado el importante tema durante el último siglo en nuestro país.
El estudio de referencia se realizó a través de una encuesta que abarcó un universo de 120 empresas mexicanas que emplean a más de 1.1 millones de personas que producen en 35 por ciento del Producto Interno Bruto del país.
Al respecto, Andrea Lobato Meeser, reconoce que a México aún le falta mucho para alcanzar la paridad de género, pues “si seguimos con la misma tendencia, para el 2050 únicamente el 20 por ciento de los cargos de alta dirección serán ocupados por mujeres, y todavía la mitad de los mexicanos consideran que si una mujer gana más dinero que su esposo, esto ocasionará problemas en su casa; que si una madre tiene un trabajo remunerado, sus hijos estarán desatendidos, y esperan que las mujeres se encarguen del trabajo del hogar casi en su totalidad ”.
Ante tal panorama, estima que en 30 años, tres de cada diez CEOs serán mujeres, por lo que advierte: no podemos esperar 100 años para que empresas líderes tomen acciones contundentes que aceleren la paridad, y así logremos el avance de la economía y la sociedad mexicana.
Y es que en México, la brecha salarial sigue afectando a las mujeres y es más intensa mientras se escala en el organigrama, como muestra el estudio que en el México actual apenas uno de cada 10 CEOs son mujeres; es decir, muchas mujeres que se encuentran en puestos de liderazgo son las únicas en su rango o las primeras en obtenerlo, de tal suerte que se requieren más modelos a seguir en todos los sectores y en todos los puestos para que a más mujeres las vean como ejemplo y que cuando se piense en liderazgos, nos refiramos a una mujer.
El reporte de McKinsey & Company demuestra que la participación de las mujeres en las empresas mexicanas aumentó únicamente tres puntos porcentuales, del 35 al 38 por ciento, del año 2018 a la fecha, aunque la representación cambia, y se va haciendo más notoria en los altos mandos, a nivel de dirección, donde hay un 40 por ciento de participación de las mujeres; pero persisten sesgos y creencias sociales conservadoras que dan preferencia a los hombres, en estudio y trabajo.
*Licenciado y Maestro en Periodismo
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