Vanessa Baez
Locatarios de la comunidad informaron que la abundancia de baches en la zona pone en peligro a automovilistas y al sistema de transporte público.
Vecinos de la colonia San Antonio Buenavista, localidad ubicada en la zona noreste del Valle de Toluca, informan que los baches de la avenida principal José María Heredia la han vuelto casi intransitable, entorpeciendo la fluidez del transporte público, automovilistas y ciclistas.
En un recorrido por la avenida se observó la presencia de 117 baches, de los cuales al menos 35 son de amplia magnitud y profundidad. Los vecinos han tenido que emprender acciones por su propia iniciativa, colocando rellenos de escombro o piedras para subsanar un poco la omisión del gobierno local.
Entre los principales daños materiales que se registran a causa de los baches están: afectaciones a la suspensión de los automóviles y múltiples ponchaduras de llantas.
La calle José María Heredia atraviesa la localidad desde Calzada del Pacífico hasta el Centro Cultural Mexiquense. Una de las observaciones más sobresalientes indica que los extremos de la avenida son los que se encuentran en mejor estado, dejando el interior de la colonia en las peores condiciones y expuesta a daños para quienes transitan.
Un peligro para el transporte
A pesar de que hace seis meses se realizaron acciones de mantenimiento por parte de autoridades municipales para recubir los baches de la calle José María Heredia, no aportaron mayores beneficios, ya que rápidamente el material se levantó dejando al descubierto nuevamente el problema.
Jósé Lino Bernal, locatario de la zona y automovilista, denuncia que los delegados de San Antonio Buenavista no han realizado acciones concretas para dar solución al problema de raíz, ya que el bacheo o recubrimiento con malos materiales sólo es temporal.
Así mismo, informa que el mayor riesgo se presenta por la noche y en la temporada de lluvias, ya que se dificulta la visibilidad del bache y es más fácil caer en él.
“Empeora con la lluvia y por la noche no se puede observar la gravedad del bache”, señaló.
Habitantes también indican que la presencia de estos socavones entorpece el tránsito de automovilistas, ciclistas y el transporte público, ya que el paso se vuelve sumamente lento al intentar esquivar las áreas dañadas, incluso deben transitar en sentido contrario para no caer en los baches y dañar sus transportes.
Juan García, dueño de una tienda de abarrotes sobre la avenida, afirma observar constantemente cómo los autos caen y dañan sus llantas, incluso uno de sus familiares sufrió una ponchadura en el trayecto y tuvo que solicitar ayuda.
Finalmente, es necesario puntualizar que en múltiples ocasiones este tipo de zonas periféricas no cuentan con la atención necesaria para el mantenimiento por parte de las autoridades a nivel municipio y delegación.
(Foto: Vanessa Baez)
