Ximena Barragán
El respeto a los derechos humanos y la ausencia de intención represora en los mandos hace la diferencia en la participación del Ejército en las tareas de seguridad pública, aunque “ideológicamente” no nos guste, aseguró el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Al ser cuestionado respecto a la recomendación de la Organización de las Naciones Unidas para limitar la participación de militares en las acciones de seguridad, el primer mandatario respondió que, en estos casos, “no se puede ser manqueo”.
Destacó la diferencia entre lo que su gobierno solicita de las fuerzas armadas y lo que se hacía antes. “Si al ejército se le da la orden de llevar a cabo masacres, limpias, y de remate a los heridos, eso es reprobable, inhumano, y es un irresponsabilidad. No sólo eso, puede tratarse de un delito…”
En conferencia de prensa, resaltó que desde su administración no se han ordenado actos de represión, aun cuando sí han ocurrido hechos negativos, se han corregido “y se pueden observar en recomendaciones de derechos humanos en los datos oficiales”.
En este sentido, recordó que, cuando se suscitó la persecución a militares en Michoacán, surgieron críticas y hasta burlas, así como su decisión de liberar al hijo de Joaquín Guzmán Loera, Ovidio, en Culiacán Sinaloa, para evitar la muerte de civiles inocentes.
Detalló como su política contrasta con la del ex presidente Felipe Calderón, quien ordenaba los asesinatos de integrantes de bandas delictivas.
(Foto: presidencia)
