Santuarios, iglesias y templos han sido parte fundamental de la historia y desarrollo de las comunidades. Más allá de la fe, el Turismo Religioso es para aquellos amantes del arte y la arquitectura, estos recintos son un ejemplo de diferentes estilos como el Barroco, Art Nouveau y Colonial, entre otros.
Uno de los recintos más visitados en todo el año en el Estado de México es el Santuario del Señor de Chalma, ubicado al suroeste de la capital mexiquense. Los orígenes de Chalma son prehispánicos, en sus alrededores existieron cuevas en las cuales se veneraba a deidades.
Este Santuario está conformado por un templo y convento construidos en el siglo XVII, el templo es de estilo neoclásico.
De igual forma, la iglesia de San Lucas Chiautla tiene más de 495 años de historia, construida con una arquitectura virreinal del siglo XVI. El retablo en honor de San Lucas es un elemento de gran valor para la humanidad.
En Malinalco, el Convento Agustino de la Transfiguración fue construido a mediados del siglo XVI. Ubicado en la cabecera municipal, con un estilo plateresco y arcos de medio punto, la fachada esta realizada en un estilo renacentista.
El Ex Convento de San Nicolás de Bari Oxtotipac, en Otumba, cuenta con una fachada de sencillos labrados con un retablo en estilo barroco, es uno de los conventos más pequeños construidos en la Nueva España, por ello, es una de las principales joyas religiosas del estado y el país.
Por su parte, la Iglesia de la Virgen de la Peña de Francia, ubicada en el Pueblo Mágico de Villa de Carbón, comenzó su edificación en 1700, con una duración de 40 años. En México es la única iglesia consagrada a esta virgen, en Latinoamérica existe un recinto similar en Brasil y uno en Argentina.
La Iglesia de Nuestra Señora de Tonatico, ubicada en el Pueblo Mágico del mismo nombre, fue construida en el siglo XVII con un estilo neoclásico, fue declarado santuario en 1968 y es el único dedicado a la orden Mariana.
La Parroquia de la Asunción de María en el Pueblo Mágico de Ixtapan de la Sal, construido en el siglo XVI, con una fachada en estilo tequitqui. El alfiz, las jambas y nichos representan estilos mudéjar, renacentista e indígena. Cuenta con una campana original de 1605.
El Templo de Francisco Javier, en el Pueblo Mágico de Tepotzotlán, construido en el siglo XVII, fue denominado Monumento Nacional y fue cedido al INAH para su conservación. En su interior aloja 10 retablos barrocos y pinturas al temple.
Dado que la entidad continúa en semáforo naranja, la dependencia estatal recomienda responsabilidad para seguir las medidas sanitarias como el uso de cubrebocas, lavado constante de manos y mantener la sana distancia.
De igual forma, para quienes visiten de forma presencial estos sitios, solicita que consulten el Decálogo del turista responsable.
(Foto: Especial Portal)
