Los padecimientos mentales que ha presentado la población debido a la saturación de información sobre el COVID-19 y las fake news, fenómeno bautizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como infodemia no solo se traducen en depresión, pánico, estrés, ira y tristeza, sino también se pueden reflejar en el resto del organismo a través de enfermedades como la neurodemartitis.
Miguel García Conejo
Así lo advirtió Alejandro Gutierrez Cedeño, Coordinador del Centro de Estudios y Servios Psicológicos Integrales de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), quien además señaló que este nuevo entorno, en el que la normalidad de hace dos meses ha sido descartada, supone un nuevo reto para la Psicología.
“En esto, lo que nos estamos exponiendo justamente, son a los trastornos emocionales, a las dificultades psicológicas de afrontar lo que nos está ocurriendo (…) lo que estamos enfrentando es una dificultad emocional que por supuesto trastorna nuestra mente, nuestro cuerpo, nuestro comportamiento y es en donde debemos trabajar”.
En ese sentido, el coordinador del CESPI reconoció que las personas tienen las herramientas en casa para poder llegar a un estado de bienestar mental a través de simples actividades e introspectivas.
“Es un momento de análisis de consciencia pero también de echar a andar nuestros procesos cognitivos, razonar, pensar, analizar, antes de actuar. Entonces me parece que con eso podemos contribuir”.
Cabe destacar que especialistas en la materia coinciden en que la salud mental deberá ser marcada como canasta básica, ya que predicciones de la organización mundial de la salud indican que los trastornos mentales se convertirán en la primera causa de discapacidad a partir de este año en México.
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