Actualmente se tienen detectados 30 puntos vulnerables a colapsos a lo largo del Río Lerma, es por ello que es urgente que se consolide el ensanchamiento de los bordos y reforzamiento de barreras laterales, en especial durante el estiaje que es cuando la falta de lluvias permiten el avance de las obras.
Miguel García Conejo
Estas acciones se llevan a cabo de manera conjunta entre la Secretaría de Obra Pública y la Comisión Nacional del Agua en especial en los puntos críticos.
Al respecto, Rafael Díaz Leal Barrueta adelantó que medidas como en el embovedamiento de éste y otros cauces están descartadas, al ser alternativas que generan mayores problemáticas con el paso de tiempo.
Uno de los ejemplos de las deficiencias que tienen estos sistemas de bóvedas es el río Verdiguel que corre por el centro de Toluca, y que hoy representa un riesgo para los cientos de casas y negocios asentados sobre ésta.
“En el país se dio mucho este fenómeno de embovedar los cauces naturales, las grandes capitales del mundo en Europa o las grandes ciudades de Estados Unidos todas tienen ríos o cauces naturales preciosos que las atraviesan, en México se nos ha ido esa oportunidad; nos ha dado por embovedar los ríos y ocultarlos y que eventualmente se convierten en drenajes lo que estamos haciendo ahorita es lidiar con esta condición de infraestructura que ya existe por más de 100 años para tratar de reforzarlo”.
A nivel local, añadió, la solicitud para los gobiernos municipales es reforzar las acciones de desazolve de basura para darle agilidad al agua y contar con la maquinaria necesaria en materia de bombeo.
