Tres establecimientos comerciales fueron asegurados en los últimos días tras registrarse hechos violentos con arma de fuego en su interior, se trata de los bares Nay-Ney en Tultitlán, Capitán Barbossa en Ixtapaluca, y una supuesta barbería en Cuautitlán Izcalli; todos ellos vinculados a actividades criminales.

De acuerdo con autoridades estatales, el cierre de los establecimientos derivó del operativo de la estrategia de seguridad “Atarraya”, que ha dado como resultado el aseguramiento de 817 establecimientos en el Estado de México.

De acuerdo con esta información, los dueños de 216 de estos negocios no han comparecido para acreditar la propiedad de los lugares, por lo que en la última acción las autoridades realizaron la clausura de estos lugares y confirmando las sospechas sobre que estos giros podrían formar parte de redes criminales.

Las autoridades continúan con las investigaciones para esclarecer estos hechos y dar con los responsables, por lo que la Fiscalía del Estado de México ha puesto a disposición de la ciudadanía canales de denuncia anónima para seguir debilitando estas estructuras delictivas.