Al reconocer el legado de las mujeres sufragistas que sentaron las bases de la participación igualitaria de los géneros masculino y femenino en la vida política nacional, la magistrada Mónica Soto Fregoso, presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) manifestó la voluntad de dicha instancia en garantizar la participación equitativa en la vida pública y proteger los derechos de las mujeres contra la violencia política en razón de género.

En su mensaje durante la sesión solemne del Senado de la República, en la que se inscribió en el muro de honor la leyenda ‘A las sufragistas que nunca se rindieron ni abandonaron la lucha por la libertad’, agregó que el Tribunal Electoral tiene como responsabilidad proteger los derechos políticos de las mujeres y avanzar en la consolidación de una democracia sustentada en el principio de igualdad y no discriminación de los derechos humanos, donde todas las voces tengan espacio y ninguna sea excluida por razón de género.

Soto Fregoso refrendó su compromiso con la impartición de justicia electoral con perspectiva de género, y señaló que el TEPJF trabajará para que México sea más justo, más igualitario y más paritario.

En ese sentido, manifestó que la institución jurisdiccional que encabeza refrenda su compromiso con la igualdad sustantiva y no descansará hasta que la participación política de las mujeres en todos los niveles sea tan plena, libre e igualitaria como lo soñaron las sufragistas que lucharon desde finales del siglo XIX y mediados del siglo XX por sus derechos político-electorales.

Desde la tribuna de la Cámara Alta, resaltó que las sufragistas dejaron una lección de resiliencia y un legado imborrable de que la justicia, la igualdad y la democracia no son conceptos estáticos, sino conquistas que debemos defender constantemente.

Al referir la situación actual de la mujer, Soto Fregoso resaltó que en el pasado proceso electoral se atestiguó una participación en igualdad y paridad entre mujeres y hombres con respeto a la diversidad, por lo que se puede afirmar que México no sólo rompió el techo de cristal con la elección de la primera mujer presidenta de la República en 200 años, sino también ha comenzado a desprenderse del piso engomado, aunque persisten enormes retos para lograr la construcción de una mejor democracia, más paritaria y absolutamente libre de violencias.

En su mensaje, la magistrada presidenta del TEPJF honró la memoria y el legado de algunas de las sufragistas como Hermila Galindo, Elvia Carrillo Puerto, Dolores Jiménez y Amalia González Caballero, entre otras, quienes con su sacrificio, tenacidad y visión abrieron el camino hacia un México más justo, más igualitario y paritario.

Por ello, añadió, la inscripción de la leyenda que les rinde homenaje en el Muro de Honor del Senado es un acto de mínima justicia para recordar a las mujeres que, en tiempos en donde el silencio era impuesto, alzaron sus voces y desafiaron las normas establecidas para exigir su lugar en la democracia, pese a la incomprensión, escarnio y muchas veces la violencia que sufrieron.

Las sufragistas mexicanas nos enseñaron que el derecho a votar no es sólo un privilegio concedido por el Estado, sino un pilar de la democracia humana, expresó la magistrada presidenta de la Sala Superior.

(Foto: Especial Portal)