Leobardo Hernández 

Al asumir nuevamente que con su arribo a la presidencia "llegamos todas", Claudia Sheinbaum Pardo señaló a opositoras que se sumen como feministas que permitieron y callaron cuando los gobiernos anteriores incluso violentaron públicamente a las mujeres llamándolas "viejerío" o "lavadoras de dos patas", en alusión al panista Vicente Fox, durante su mandato, además de perpetuar el sometimiento estructural en el país al sector femenino de la población.

"La defensa de los derechos de las mujeres tiene que estar enmarcada en la defensa de los derechos del pueblo de México, no están separadas", sostuvo.

Durante la conferencia de prensa mañanera en Palacio Nacional, la mandataria remarcó que su gobierno busca la equidad de género en todos los rubros y no existe mayor o menor énfasis en garantizar los derechos de uno y otro sector, sino en lograr su consolidación de forma universal y equitativa.

"Pensar que la educación no es un derecho, que la salud no es un derecho, que el acceso a la vivienda no es un derecho, que el acceso a la cultura o a la lectura no es un derecho; y defender los derechos de las mujeres, me parece a mí una contradicción", señaló respecto al supuesto feminismo de la alcaldesa panista de Cuauhtémoc (CDMX), Alejandra Rojo, cuya ideología de partido rechaza este tipo de posturas, así como la de la interrupción legal del embarazo, lo que contraviene el derecho de las mujeres a decidir sobre sus cuerpos.

"Por eso yo pienso que esta visión de la derecha, del 'feminismo de derecha', vamos a decir, pues tiene muchas carencias porque ¿cuál igualdad?", acentuó.

Para reforzar su argumento, cuestionó "¿Por qué cuando tuvieron el poder nos llamaron 'lavadoras de dos patas'?, o ¿por qué hablaron del 'viejerío'? O ¿Por qué aumentó la violencia contra las mujeres? O ¿por qué no se tuvo políticas de acceso a las mujeres a la educación?", expresó en alusión a los gobiernos panistas y priistas, siendo frases emblemáticas de Vicente Fox las citadas por la presidenta, y enfatizando la prevalencia estructural del sometimiento masculino.

"Sí hay diferencias en la visión y en la concepción nuestra de los derechos de las mujeres en el marco de la justicia social", concluyó.