Miguel García

Cacao fusionado con agua miel y cereza en la elaboración de un curado de pulque color rojo, como la pasión del amor, fue parte de lo que se vivió este 14 de febrero, Día de San Valentín, en una jornada artística y cultural en torno a la bebida tradicional mexicana: el pulque.

La cita fue la Pulquería la Revolución del Mayahuel, ubicada en el municipio de Metepec. En entrevista con Diario Portal, Juan Manuel Gutiérrez Gabino, organizador y maestro en la elaboración del pulque, indica la Importancia de revalorar esta bebida ancestral que forma parte de los orígenes de México, y que por años fue estigmatizada.

Las pulquerías, indica, hoy son vistas por una nueva generación de jóvenes que mira en ellas parte del pasado y presente de México, entendiendo que es una bebida nuestra y es un derecho de todos los mexicanos “tomar pulque”.

Lamenta que por décadas intereses comerciales, más apegados al modelo neoliberal, impulsaron la idea de qué el pulque representaba una bebida para gente sucia y de escasos recursos, cuando el pulque, afirmó, sólo esconde tradición y salud.

“Es una bebida que es cultura y además nutritiva aparte de que no te hace daño; te da energía y salud”.

El pulque hoy está siendo conocido por una generación de jóvenes padres y adultos que miran en ella una posibilidad para beber un poco de México.

Con este objetivo, se presentó: ‘Yollotl’, bebida del amor que recupera la tradición ancestral de nuestra gastronomía prehispánica y que implicó una semana previa de preparación.

“En la parte de la elaboración, sí es una alquimia, hay que saber cómo es la cocina, todos los conocimientos para que quede su guiso perfecto”.

Este curado, explica, tiene cacao, considerado aquí como una medicina de la cultura maya, usado para rituales y alimento. Además está aderezado con cereza y alcohol para una conexión con el corazón.

“Este curado de pulque ha sido creado desde el corazón, qué es lo que queremos expresar”. La jornada artística y cultural que contó con el poeta Pedro Salvador Ale, quien prestó sus piezas líricas para su adaptación en ópera.

(Foto: Miguel Garcia)