Vanessa Baez
El pinole, uno de los productos artesanales tan antiguo como el maíz, ha ido perdiendo con el paso de los años su proceso ancestral de creación, tostado y sabor; así lo indicó Juan Manuel Yáñez, artesano.
El productor, quien es originario de Santiago Tianguistenco, y creador de la marca Pinomexti, compartió en entrevista para Portal Diario la importancia de conservar las recetas tradicionales de este alimento y fomentar su consumo en beneficio de la economía local de quienes aún lo producen.
El pinole, también conocido como pinol, es un alimento prehispánico que puede consumirse de varias formas y se vende en forma de polvo derivado del maíz negro o azul y que pasa por un proceso meticuloso de tostado junto con ingredientes como la canela y el azúcar que le dan un sabor dulce y típico de los granos de maíz.
“El pinole se puede consumir solo porque anteriormente se conocía como un dulce tradicional, posteriormente se realizó en atole y con agua”
Posterior al tostado, el pinole pasa por varias técnicas de molido y separación para generar un polvo con él, sin embargo, todo esto se realiza mediante hornos de leña y ollas de barro que le ayudan a darle un sabor particular de la receta tradicional.
Una tradición en peligro de extinción
Así mismo, el artesano mexiquense señaló que es importante visibilizar este tipo de labor tradicional y fomentar su consumo ya que en las actuales generaciones existe un desconocimiento con las raíces gastronómicas como este producto derivado del maíz azul.
“Se está perdiendo la tradición: “se mueren los viejos, se muere la tradición”, por eso se está perdiendo el conocimiento ancestral, así como las costumbres y tradiciones de cada región”, mencionó el productor.
Además, agregó que otro de los motivos por los que la gente suele no consumirlo es porque temen ahogarse, principalmente los niños pequeños; sin embargo, Juan Manuel comentó que esto ocurre por una mala elaboración del pinole que le otorga una textura volátil y peligrosa y yace en un mal tostado del maíz.
“El tostado, este debe ser en un punto exacto, ni crudo ni quemado y si la gente se da la oportunidad de probarlo en varios lados tienen sabores desagradables, quemados, amargos o sin sabor y con una textura volátil que puede generar riesgos”, puntualizó.
Recetas que mantienen el comercio local
Por otra parte, Yáñez también expresó que este tipo de producto no se basa únicamente en la producción y venta del pinole sino que Pinomexti también comienza desde la siembra del maíz en el mismo municipio de Santiago Tianguistenco, lo cual da empleo a varias personas de la comunidad.
“Es un apoyo al campo [la compra de este pinole] y a la gente que trabaja, se trata de una red de labores de Santiago Tianguistenco que también da ingresos económicos al comercio local”, concluyó.
Finalmente, Juan Manuel invitó a la población a seguir consumiendo local y apoyando este tipo de recetas y alimentos prehispánicos.
Para contacto en redes sociales, pueden encontrar al artesano en:
Facebook: Pinolli Mextitla y Pinomexti
(Foto: Vanessa Baez)
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