Elena Aguilar 

En el Estado de México se espera la participación de más de un millón de jóvenes niños y niñas mexiquenses en la novena edición de la Consulta Infantil y Juvenil, informó Iván Álvarez Gómez, Vocal de Capacitación Electoral y Educación Cívica de la Junta local del INE Mexiquense. 

En entrevista recordó que en el ejercicio del 2018 participaron más de 880 mil menores y, este año se prevé el uso de nuevas tecnologías que facilitan la participación de los niños niñas y adolescentes desde sus hogares, pues podrán acceder a la consulta a través de la página de internet del INE. 

El objetivo, dijo, es incentivar la participación desde muy pequeños en todo tipo de consulta ciudadana e incluso en las jornadas para la elección de autoridades, así como, brindarles un espacio para que puedan manifestar sus intereses y sus preocupaciones. 

“El INE organiza cada tres años estas consultas. Antes era a la par de las elecciones, pero decidimos separar por cuestiones de logística”.  

Sobre la expectativa de este ejercicio, el funcionario electoral destacó que ésta año destacó una mayor participación en elecciones ordinarias, y lo mismo se espera con niños y jóvenes. 

Afirmó que los menores pueden participar desde cualquier lugar y con un dispositivo, modalidad que esperan, incremente la participación  

Mencionó que el grupo al que se enfocan es de 3 a 17 años, por lo que la promoción se está haciendo en algunas escuelas, con la finalidad de lograr buenos resultados.  

Dijo que esta ocasión abordarán tres temas que son: medio ambiente, derechos humanos y bienestar, que se consideraron tras la realización de una encuesta, de modo que fueron los propios jóvenes  quienes los determinaron. 

De acuerdo con los resultados de los ejercicios anteriores, las autoridades electorales observaron que los niños más pequeños, son más tolerantes, pues no importa para ellos quién en casa trabaja, lo que quieren es estar cerca de papá y mamá, además se preocupan por otros temas como la paz, el medio ambiente y la seguridad. 

En esos mismos resultados identificaron que los adolescentes más grandes sienten mayor discriminación por su forma de vestir; que muchos trabajan y su labor no es remunerada.  

Sostuvo que los resultados de este ejercicio son entregados a las distintas instancias que atienden a estos grupos de edad, a fin de que se traduzcan en políticas públicas y acciones eficientes.  

“En general los resultados son de mucho interés, sobre todo para quienes trabajan por la niñez. Los directivos están muy interesados en saber qué opinan los niños, niñas y jóvenes”. 

(Foto: archivo)