2021-07-08-la-voz-poetica-56

La voz poética 11

Daniel Cortez 

Uno, otros, tres… ® 

Uno soy, si estoy conmigo, si contemplo el firmamento y mis sentidos resplandecen; es el momento que la luna ejerce su fuerza de gravedad en la marea que se trastorna reclamando estrellas al anochecer. Este fenómeno, suelta en mi ambiente misticismo, rachas de viento que establecen silencios en que el sentimiento genera emociones al expresarse en el momento exacto. 

Sin embargo, en “otros” me encuentro cuando divago, cuando el mundo nostálgico me pierde por noches, a causa de derrochar razón, pasión y emoción en uno que otro lúgubre pensamiento. Entonces en discriminatorias mañanas nuevamente me vuelvo “uno”, acongojado por la falta de memoria, dilato mis venas al momento de romper mi esquema y no saber donde estoy. 

En aquellos instantes es cuando divido todo en tres y me diluyo en agua para buscar tranquilidad, no soy tan diablo para amanecer con un estigma cada vez que alguien sufre por mi causa, ni soy un mártir porque he visto como se tiñe mi piel de carmín al confiar en alguien que me defraudó, tampoco soy santo para creer que mis brazos son alas y han sostenido palpitaciones en la cruel lluvia de un corazón lacerado. 

Esta es mi forma de definir mis innumerables personalidades que se distorsionan en distintos caminos en el pensamiento, es mi forma de decir que no tengo color en mi accionar diario, aunque me vista de negro continuamente; tal vez soy un bandolero en la historia de alguien que retomo mi figura de una noche oscura, o sólo soy el momento de paz que encontraron en mis manos mientras era “uno”. 

Por ello, ni uno, ni otros, ni tres, soy un infinito de emociones veneradas y castigadas por mi narcisismo, un detalle fugas delineado en un cometa, una palabra que se acciona como verbo, que deriva a un sustantivo llamado Daniel. 


Categoría:
Nacional
Etiquetas:

    No hay etiquetas asociadas a éste artículo.

Vistas:
71

Notas Relacionadas