Aranxa Solleiro  

Una tarde de diciembre, antes de la festividad de Noche Buena, salió Gonzalo a la calle para atender su corte de pelo de cada mes, sin embargo noto que las puertas de cada una de las estéticas que conocía estaban cerradas, había olvidado que el semáforo epidemiológico en rojo, no incluye como actividad esencial el trabajo de peluquerías.  

A partir de ese día, surgió la idea de poner en marcha un nuevo negocio que compartiría con sus amigos Abimael (25) y Javier (27), el trío que no han dejado que la pandemia les impida sostenerse y seguir cumpliendo con sus metas. Tras haber perdido sus trabajos a finales del año pasado, decidieron satisfacer una necesidad común entre las personas, especialmente en los varones. 

Su idea de negocio va más allá de lo común, en tanto que su creatividad y talento, destaca de su competencia, esto tras convertir una combi antigua de sus padres en estética y barbería rodante. El transporte tiene alrededor de 35 años de uso y esperan con esto, darle una fuente más para que siga acumulando los kilómetros presentados en el tablero. 

La combi, recorre las principales calles de la ciudad de Metepec y Toluca tocando puerta por puerta para ofrecer sus servicios, incluso se han desplazado hasta la Ciudad de México por citas que les han hecho amigos y familiares. Hasta el momento, ha sido un éxito, en tanto que los clientes lo consideran un servicio personalizado y atienden los cuidados de protección para evitar ser contagiados al desplazarse a otro sitio.  

“Trabajaba en una estética desde hace 17 años, me gustó siempre mucho y aprendí durante ese tiempo cómo hacer cortes tanto para hombres, como para mujeres, ahorita solo estamos enfocados a hombres. Trabajamos todo: corte, barba baja, alta, limpieza de poros, etc. y hasta el momento la gente lo ha recibido muy bien. Nosotros vamos hasta donde nos digan y si todo sale bien y nos sigue yendo como hasta ahora, pues ya tendremos atención también de corte de pelo para mujeres.” Comentó Gonzalo.  

Desde la llegada, hasta el último instante en el que el cliente es atendido por el trío, se sanitiza la unidad completa para que no exista riesgo de partículas de aerosoles en el interior, se toma la temperatura cuando el cliente sube y se considera el uso obligatorio de cubrebocas.  

Los precios son variados dependiendo del paquete que se elijan, sin embargo van desde los 350 corte sencillo o solo el arreglo de barba, o si se desea que se incluyan ambos servicios, se deberá pagar el precio de 550 pesos.  

Hasta el momento, solo recorren las calles sin una promoción específica, en tanto que iniciaron a principios del presente mes, no obstante, consideran que mientras vayan creciendo y sus ingresos sean mayores, podrán optar por la promoción a través de redes sociales u otros medios de comunicación masiva.  

El trío, demuestra que mientras la intención de mejorar y salir adelante persista, la creatividad podrá ser una herramienta precisa para lograr objetivos.  

(Foto: Aranxa Solleiro)