José Luis Pedraza, presidente de la Adigal, adelantó que la solicitud del sector será que haya mayor sensibilidad en la situación financiera que se enfrenta, esto a través de un incentivo fiscal de al menos 2 por ciento en el impuesto sobre nómina, descuento por pronto pago en obligaciones como licencias de funcionamiento y pago del impuesto predial, a fin de atajar este año de pandemia, que dejará ventas por debajo de la mitad de las registradas en 2019. 

Miguel García Conejo

De acuerdo con Pedraza, presidente de la Asociación de Distribuidores de Gasolina y Lubricantes (Adigal) del Valle de Toluca, el día de hoy se encuentran trabajando al 40 por ciento de su capacidad; afectados también por el regreso al color rojo de semáforo epidemiológico toda vez que tradicionalmente las fiestas decembrinas era una de las de mayor movilidad de las familias en el año.  

Para evitar despedir al personal, dijo, han instrumentado rotación de su gente toda vez que son familias y trabajadores ya capacitados:  

“nos cuesta a nosotros muchísimo capacitar y adquirir confianzas. Todo este tipo de situaciones en un tema complejo, sí preferimos aguantar muchísimo los empleos a despedir personal. En este caso, hemos rotado muchísimo personal, y con una estrategia para evitar el riesgo de contagio”.  

En este sentido, adelantó que al inicio del siguiente año se espera un incremento de entre 10 y 15 centavos por litro en el precio de combustible como parte  del reajuste en materia impositiva para el sector energético y del incremento en el índice de inflación previsto para el primer trimestre del próximo año. 

“Ahorita hay que esperar cómo reacciona el mercado al cambio del año, y lo que es un hecho es que a partir del primero de enero hay un impuesto especial a productos y servicios de combustible”.  

En lo que va del periodo de pandemia, el sector gasolinero del estado de México registra una pérdida acumulada de hasta 75 mil millones de pesos, derivado del confinamiento y la disminución de la actividad. 

(Foto: web)