A favor de la No Discriminación  

Ramón Cuevas Martínez* 

El presidente podrá decir todos los días que conoce 2,474 municipios y alcaldías del país, pero seguramente se refiere solo a las carreteras y las plazas públicas donde a lo largo de 18 años congregó a sus seguidores, pues su desinterés por el trabajo del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (CONAPRED) demuestra que ignora el origen de las instituciones mexicanas, y mucho menos conoce el impacto que tienen en la vida de las personas. 

CONAPRED es una institución de las más nobles que ha dado origen la política mexicana, nacida de muchos precursores de la más pura izquierda, quizás a quien más se recuerda es a Gilberto Rincón Gallardo, quien enarboló durante toda su carrera política la lucha por los grupos tradicionalmente excluidos por la sociedad mexicana: las personas con discapacidad. 

La lucha a favor de la No Discriminación ha dado frutos en el diseño de instrumentos jurídicos, en  2003 se creó la  Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación (LFPED), misma que 2014 el Congreso de la Unión reformó de manera integral para dotar al CONAPRED de mejores y más amplias atribuciones en la materia y brindar una efectiva protección del derecho a la No Discriminación de las personas que viven y transitan por el territorio nacional, con mayor  apego a los instrumentos internacionales en la materia, ratificados por el Estado mexicano. Cabe resaltar que, desde la creación de la LFPED en el 2003 a la fecha, 32 entidades federativas han creado paulatinamente leyes locales contra la discriminación. 

Desafortunadamente la discriminación no solo alcanza a las personas con discapacidad. Los resultados de la Encuesta Nacional Sobre Discriminación (ENADIS) 2017, permitieron conocer la discriminación y desigualdad que enfrenta la población indígena, con discapacidad, por su religión, las niñas y niños, personas mayores, adolescentes y jóvenes, y mujeres. 

Comparto algunos datos: 

1. 20.2% de la población de 18 años y más, declaró haber sido discriminada en el último año. Los motivos de discriminación que se señalan principalmente son: la forma de vestir o arreglo personal, el peso o estatura, la edad y las creencias religiosas. 

2. El 56% de mujeres de 18 años y más declaró haber sido discriminada en el último año por su apariencia personal. 

3. El 53 % de las mujeres de 18 años y más declaró al menos un incidente de negación de derechos relativos a la posibilidad de recibir apoyos de programas sociales. 

4. El 39% de la población de 18 años y más declaró que NO le rentaría un cuarto de su vivienda a una persona JOVEN. 

5. El 86% de las personas con discapacidad para moverse se enfrentó con alguna barrera de accesibilidad cuando buscó información sobre algún trámite, servicio o programa gubernamental. 

Sobre esta base de conocimiento es difícil no comprometerse con la labor del CONAPRED. A todas las personas discriminadas, y a las organizaciones sociales que se dedican a combatir la discriminación, el presidente les debe una disculpa. 

*Consultor en Gobernova 

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