Pese a que ha aumentado la movilidad drásticamente desde que se instauró la nueva normalidad, gasolineras del valle de Toluca señalan que sus ganancias apenas se han incrementado en 1 por ciento, por lo que están al borde de la quiebra. 

Miguel García Conejo 

Datos de la Asociación de Distribuidores de Gasolina y Lubricantes (ADIGAL) señalan que las pérdidas desde que comenzó la pandemia de covid-19 ascienden a 15 mil millones de pesos en la entidad. 

“Ha empezado a aumentar, en el rastreo que traemos de la primera semana se puede decir que traemos un aumento de uno o dos por ciento comparado con un 70 por ciento que traemos de pérdida, es completamente marginal y necesitamos ver cómo se comporta después del efecto de la quincena”, comentó Jorge Luis Pedraza, presidente de ADIGAL. 

Señaló que la crisis no es nada más por la pandemia, sino que comenzó con el gasolinazo en el último año del sexenio anterior, seguido del combate al huachicoleo que obligó al cierre de ductos. 

Asimismo, lamento que, pese a que los precios se han recuperado poco a poco, hay un alza de 48 centavos semanales en el coste de las gasolinas, muchas estaciones optan por seguir vendiendo barato para poder cumplir con los pagos a proveedores y de salarios. 

“Tenemos una falta de liquidez sumado a que tenemos inventario que no hemos vendido y que tenemos que pagar”. 

ADIGAL prevé que el costo por encima de los 17 pesos por litro se recupere a finales de junio, mientras que para finales de julio pronostican que se eleve por encima de los 18.50 en la gasolina regular mientras que el diésel se ha recuperado con mayor constancia, lo que podría ayudar a la recuperación del sector. 

Foto: Gustavo Fring en Pexels