El cantautor mexicano murió la tarde de este jueves 30 de abril, tras ser internado con síntomas de COVID-19 en el Hospital “20 de noviembre” del ISSSTE el pasado martes. Según reportes de la institución a distintos medios, presentaba fiebre, dolor intenso de cuerpo y complicaciones respiratorias. 

Leobardo Hernández 

El también actor capitalino tenía 85 años, inició su carrera con un disco llamado “Herencia Lírica de México”, publicado en 1963. Asimismo, fue una de las voces importantes y representativas de la juventud de la época por sus presentaciones en C. U. de la UNAM durante distintos movimientos estudiantiles, publicando un par de discos con composiciones propias y de compañeros de lucha con el título “México 68”, en dos volúmenes.  

Según relató en algunas entrevistas, sus primeros discos los hizo inspirado en su abuela, pues fue quien inculcó en el cantante de la voz profunda las canciones vernáculas de México, composiciones populares que incluso datan siglo XIX, como “Dónde vas, Román Castillo”, que es un antiguo romance. 

Acompañado casi siempre por “Los Morales”, los ritmos latinos, sones mexicanos y un toque de rock fueron los componentes envolventes de sus famosas Sátiras Políticas, donde se parodiaban canciones populares de la cultura nacional con letras irreverentes y críticas hacia los gobiernos en turno, pues desde 1963, inicio de su trayectoria, hasta el 2000 vivió las extravagancias del PRI y aún las del PAN en los dos sexenios consecuentes, hasta la vuelta del partido en otrora hegemónico al poder.  

La versatilidad le permitió interpretar temas hilarantes como los de Chava Flores, “El Metro”, por ejemplo, hasta la canción que todos han escuchado y dedicado en algún momento, “Por ti”. En su faceta actoral se recuerda su interpretación de “El Estilos” en “Los Caifanes”, de 1967, entre muchas otras.  Sin duda, quedará su legado artístico y la potente voz que nunca muere.  

(Foto: web)