Aunque las estaciones de servicio de distribución de combustibles están operando al 100 por ciento y con todas las medidas de seguridad, además de que ha dado una baja significativa en el precio de la gasolina y el diésel, la jornada de Sana Distancia ha ocasionado una baja sustancial en la demanda que alcanza hasta el 60 por ciento. 

Miguel García Conejo 

Así lo reconoció Jorge Luis Pedraza, presidente de la Asociación de Distribuidores de Gasolina y Lubricantes (ADIGAL) en el Estado de México, al tiempo que aseguró que el abasto está garantizado durante el tiempo que dure la pandemia de COVID19. 

“Después del desabasto que se presentó en el mes de enero del año pasado, se añadieron a la distribución de gasolina cuatro marcas más, ademas de PEMEX, como G500, Total y Mobil por lo que ya hay un abasto garantizado, incluso ya están llegando los primeros embarques de una nueva marca a la zona”. 

En lo que refiera a las pérdidas en gasolineras, lamentó que ya ronda los 3 mil 250 millones de pesos por cada 20 días de la contingencia de salubridad, ya que de las mil 100 estaciones de servicio que existen en la entidad, calculan que van a perder entre el 40 y 60 por ciento de sus ingresos. 

“Cómo no tenemos un horizonte de tiempo, no tenemos el impacto, no podemos cerrar, si en alguno de los casos se negará a dar el servicio, existe una ley que nos obliga o faculta Ejecutivo a operar las estaciones de servicio con personal de ellos o militar. De los 26 mil empleos no creemos que vayamos a perder ninguno”. 

Señaló que perder empleados certificados, capacitados y con exámenes toxicológicos aprobados, en especial de PlomoBenceno en sangre, y las capacitaciones en materia de seguridad industrial les significa mucho más dinero que lo que pueden tener. 

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