De cada 10 casos que se detectan de cáncer de estómago en el Estado de México, hasta siete son en etapas tardías por lo que la supervivencia es apenas de meses pese a que se otorgue tratamiento al paciente. 

Miguel García Conejo 

En ese sentido, datos del Centro Oncológico del Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMyM) refieren que, aunque hay una baja en los casos de este tipo de cáncer, el tipo gástrico es la neoplasia número uno del tracto digestivo, mientras que es la quinta causa de consulta, así como la séptima causa de mortalidad. 

Si bien es posible que no haya síntomas del cáncer de estómago en las primeras etapas. Más adelante, los síntomas incluyen sensación de distensión abdominal después de comer, sentirse lleno después de comer pequeñas porciones de comida, náuseas, acidez estomacal o indigestión. 

“Esta enfermedad es mucho más frecuente en hombres que en mujeres, en una relación de 11 a 1, pues los hábitos alimenticios son determinantes en la aparición de la enfermedad, con la mayor incidencia entre los 50 y los 70 años”, comentó el subdirector médico de este centro, Roberto Fidel García Millán. 

Los factores de riesgo, añadió, es el alto consumo de grasas, alimentos ahumados, demasiado condimentados, así como embutidos, conservadores químicos, carnes asadas, así como la obesidad, sobrepeso y la baja ingesta de frutas y verduras. 

“El cáncer de estómago es frecuente que se diagnostique en etapas tres o cuatro, en las que el tumor está avanzado, afectando otros órganos vecinos, esto ocurre porque subestimamos sus síntomas, como el clásico dolor de una gastritis y esto se puede propiciar por años”. 

Actualmente el cáncer representa la segunda causa de muerte en el mundo, mientras que en México ocupa el tercer lugar, sólo por debajo de las enfermedades cardiovasculares y diabetes mellitus. 

(Foto: Olga Kononenko en Unsplash )