Después de una época de festividades y de sueños toca despertar y regresar a la realidad para enfrentar los acontecimientos que fueron surgiendo mientras se disfrutaba plácidamente. La famosa cuesta de enero siempre ha sido objeto de preocupación entre la población y este año trae consigo una pendiente aún más pronunciada para la población mexiquense, pues Raymundo Martínez, Secretario de Movilidad del Estado de México, informó en mitad de las festividades que el alza al pasaje de $2 es una realidad en la entidad.  

Guillermo Guadarrama/Jorge Rojas  

En medio de una tormenta de disgustos, confusiones y de múltiples versiones oficiales (unas más oficiales que otras como el hecho de que los transportistas ya cobren $12, cuando en redes circula información que asegura que el aumento estará autorizado hasta que la pirámide tarifaria sea proporcionada por la Secretaría de Movilidad) la sociedad no se ha quedado con los brazos cruzados como en ocasiones anteriores. Esta vez han surgido colectivos como “No al alza del pasaje Edomex” y se ha tapizado el centro de Toluca con volantes expresando la inconformidad ciudadana. Con la consigna de #NoAlTarifazoEDOMÉX que convoca a la población a protestar este 9 de enero para echar atrás la imposición de las autoridades. 

Odilón López Nava, delegado de la CANAPAT, expresa que el aumento ha sido autorizado y que por ese hecho los transportistas están facultados a cobrar la nueva tarifa. En contraposición, Erick Garay Bravo, especialista en derecho procesal y penal y catedrático de la UAEMéx, explicó en una entrevista hecha por el Sol de Toluca que el incremento al pasaje se trata de un daño patrimonial que si es aborda desde una perspectiva particular aparenta poca gravedad, sin embargo, ya abordada desde una perspectiva colectiva se agrava enormemente la situación porque impacta a millones de personas. Esto significa que se puede recurrir a un amparo colectivo promovido por un grupo de ciudadanos que comparten el mismo malestar. 

Como se ha visto a lo largo de los acontecimientos, parte de lo que más disgusto genera en la población es que el aumento no significa un mejor servicio, al contrario, pues justo después del anuncio continuaron las imprudencias de los conductores de transporte público generando choques y muertes de peatones y conductores. Aunado a lo anterior también agrava el malestar las múltiples versiones del aumento y que no haya sido hasta hoy que el secretario de Movilidad confirmó se llevará a cabo de manera oficial en febrero.  

“En la última reunión que tuvimos en esta semana, fue para generar este plazo y que sea definitivo para todos, tener este compás de espera para informar a la gente, no ofender a los usuarios, y que si alguien ya trae la tarifa, pues es bien recibido y en caso que no, pues se le informa que a partir de febrero ya se cobrará”. 

Esto quiere decir que a partir del pasado 1 de enero la tarifa ya está impuesta en 12 pesos, pero si el usuario no cuenta con la tarifa completa, el conductor continuará aceptando 10 pesos, esto hasta el mes de febrero.  

La idea, dijo, es ayudar a la economía de las familias en el inicio del año y que se distribuyan en su totalidad las pirámides tarifarias; durante enero se busca también concientizar a los usuarios sobre el porqué del ajuste. Finalmente, sólo queda esperar a que se lleve a cabo la marcha y observar la participación ciudadana y la reacción de las autoridades para saber si la pendiente de la cuesta de enero se reducirá o acrecentará. 

(Foto: Leila Vargas/José Gómez) 

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