Una vez que se acerca diciembre, las flores de nochebuena llenan el paisaje con sus colores tradicionales que año con año llevan a la población a adquirir esta flora.  

Marcela Moreno  

Por ello, la venta de este producto representa para muchas familias, una actividad económica importante que les permite generar ingresos para estas fechas, aseguró Cristina Barrera, comerciante proveniente de la comunidad indígena de San Felipe de los Alzati, tierra michoacana donde se acostumbra el cultivo de esta planta. 

"De ahí la traemos a vender para sacar algo para la comida y pues, es la tradición, se ocupa mucho para nacimientos y en general adorno de la navidad", mencionó.  

Ubicada bajo el puente vehicular de San Luis Mextepec, Zinacantepec, comentó que el proceso inicia desde marzo, momento en el cual se tamiza la tierra, se prepara la semilla y se agregan líquidos y pesticidas para evitar plagas, además se llenan las macetas para proceder a enraizar, regar y mantenerse al tanto para que crezca sanas y fuertes, por lo que, aseguró es un trabajo que requiere mucha paciencia y conocimiento en el tema.  

Rojas, amarillas, blancas y rosas, se venden entre 45 y 80 pesos según su tamaño y calidad de las hojas, aunque muchos les regatean, aseveró que siempre intentan ayudar al comprador a no gastar tanto en estos días tan difíciles para todos.  

"Apenas tuvimos un cliente que se llevó 80 y les damos precios para ayudarlos a ellos y ayudarnos nosotros porque el dinero no alcanza", argumentó.  

Recomendó que se rieguen cada tercer día, no dejarlas al sol directo, ni en la sombra prolongada además de poner atención al crecimiento de plagas, para detectarlas a tiempo y evitar su propagación en la misma planta u otras; de seguir los cuidados necesarios dijo que es posible que la flor se conserve hasta febrero.  

"Sigue viviendo mientras le guste la tierra, se puede traspasar a otra maceta, se poda, se sigue regando y vuelve a florear, si se pone atención no muere".

(Foto: Ivonne Leyva)