El Son es un género musical que, si bien tiene diversas vertientes, uno de los más conocidos es el cubano, el cual se caracterizó por sus elementos e instrumentos afrocubanos y que se popularizó gracias a grandes exponentes como Celia Cruz, Ibrahim Ferrer, Tito Rodríguez o la Sonora Matancera que llevaron a todo el mundo melodías que se volvieron estandarte de la cultura caribeña.  

Marcela Moreno  

Sin embargo, en México también existe el género, aunque no esté relacionado estilísticamente con esta escuela cubana, es decir, los temas e instrumentos son diferentes como en el son jarocho de Veracruz y el huasteco de la Sierra los cuales son muy diferentes y que son comunes en los fandangos donde los asistentes realizan el tradicional zapateado y recitan poesía cantada.  

Si bien Veracruz es un referente en el tema este género es popular en Oaxaca, Veracruz, Guerrero, Michoacán, Jalisco e incluso en el Estado de México, por ello actualmente existen agrupaciones que salvaguardan las producciones y canciones tradiciones de los pueblos, las rancherías y los campesinos, tal es el caso de la agrupación mexiquense Son de Tarima.  

Con el objetivo de rescatar este legado se conformaron por Karenina López Salina, vocalista y guitarrista; Lorenzo Nava voz y vihuela, Jorge Castañeda guitarrista, Oscar Enríquez y Elisa Fernanda Castillo bailarines, quienes aseguraron que es importante que las nuevas generaciones conozcan estas producciones que de a poco se van perdiendo por la falta de interés y del creciente bombardeo cultural derivado de la globalización.  

Aunque es desconocido por muchos, dijeron, en el Estado de México hay una gran variedad de composiciones de este tipo principalmente en las zonas que colindan con otros estados cercanos a la Cuenca del Río Balsas donde coinciden algunos municipios mexiquenses con Guerrero y Michoacán.  

“Aquí se le conoce mayormente como mariachi tradicional porque utiliza instrumentos como vihuela, guitarra, guitarrón, violín y cantos, en algunas partes se incluye requintos”. 

Aunado a lo anterior, los entrevistados aseguraron que otro elemento indispensable en el son mexicano y mexiquense es el acompañamiento de los bailarines quienes complementan los ritmos con su zapateado, por ello es por lo que se le considera otro instrumento al funcionar como percusiones.  

“Lo más común es que en los fandangos haya zapateo, cuando la música empieza y la gente acompaña cantando, los bailarines solo dibujan con los pies es decir no tocan la tarima, ya sin las voces entra el zapateado y casi siempre van a contratiempo o como se le conoce como acompañados de gatillos, esto para armonizar todo el son”. 

Pero desde el uso de los instrumentos hasta el zapateado aseguraron que, para lograr interpretar correctamente cada canción, antes deben investigaron un poco sobre sus raíces, además de indagar en los temas, en qué zonas nacieron y convivir con la gente, esto último lo consideraron primordial.  

"Se trata de canciones complejas porque en general la música campesina es difícil de tocar porque pasa de un compás a otro completamente distinto, tocarlos es un reto e interpretarlo aún más porque es todo un estilo de vida, musicalmente ya todos los tenemos, pero darle forma a la esencia del ser humano que lo toca originalmente y el sentimiento que en su momento trató de transmitir es el verdadero retro”. 

Del lado del vestuario, especificaron que los hombres normalmente usan huaraches, pantalones claros, camisa arremangada, sombrero calentano y un paliacate, mientras que las mujeres tradicionalmente portan faldas floreadas,  

Anteriormente la mujer no figuró en este tipo de agrupaciones, pero con el paso de los años ha ganado terreno y hoy ya es común verlas participar en este tipo de agrupaciones “costó pasar de ser cocinera a bailarina y de ahí a músico, y lo he visto por ejemplo en San Simón de Guerrero, Tlatlaya, Tejupilco donde no hay muchas en tocando, aún falta verlas más”. 

En su experiencia y recorridos por la republica han identificado que el nombre de la entidad ha empezado a figurar entre los músicos de son, “que nos empiecen a considera en la región es importante”. 

Por lo anterior, agregaron que en el estado hay una gran riqueza cultural y la música no es la excepción, por ello negaron que la entidad no haya nada que hacer o conocer, ya que quienes se han acercado a su propuesta musical les ha gustado, pero no saben de donde viene, sobre la vestimenta típica o el significado.  

“Se está perdiendo con las generaciones adultas que con la edad mueren junto a su música, por ello nos encontramos en modo rescate, debemos conservar este conocimiento principalmente porque en sus letras hay letras donde residen tradiciones, cultura y costumbres, porque le cantan a la naturaleza, a las muchachas, al campo y en general a la vida cotidiana, es sin duda algo que debe perdurar”.  

Para finalizar compartieron que el próximo 1 de diciembre tendrán la presentación de su disco Tierra Morena en las instalaciones del Museo del Alfeñique a las 11:45 de la mañana, por lo que invitaron a la población a acercarse a este tipo de propuestas, a las tradicionales y a las nuevas propuestas. 

Para conocer más sobre esta agrupación musical y sus próximas actividades, se puede consultar su página de Facebook en donde se encuentran como Son de Tarima, también en la plataforma de YouTube como Son de Tarima Toluca. 

(Foto: Redes)