Martha Romero

La Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (Codhem) fomenta el hábito de la lectura para la promoción del derecho a la educación, por lo que realiza jornadas lúdicas de acercamiento a la cultura de los derechos humanos con historias adecuadas al lenguaje y nivel de comprensión de cada etapa de las infancias, explicó Silvia García Fajardo, investigadora y académica del Instituto de Investigaciones y Formación en Derechos Humanos de la Codhem.

En el marco del mes de la lectura y también de las niñas y los niños, refirió que el organismo organiza jornadas divertidas de acercamiento a la cultura de paz y de los derechos humanos, a través de juegos e historias de cuentacuentos con temas y lenguaje adecuado al nivel de comprensión de cada etapa de las infancias.

Añadió que también busca fomentar no sólo el hábito de la lectura, sino el conocimiento, la comprensión y la búsqueda del ejercicio del derecho a la educación, a la lectura y a los derechos humanos en general.

García Fajardo comentó que diversas instituciones cuentan con literatura especializada para las infancias de acuerdo con sus objetivos, por ejemplo, tanto el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) como el Instituto Nacional Electoral (INE), promueven la cultura de la democracia y la participación infantil para que niñas, niños y adolescentes se acerquen al ejercicio de sus derechos político-electorales desde los primeros años de su vida de una forma lúdica.

Indicó que en el caso de otras instituciones y organizaciones internacionales, la literatura hecha para las infancias es una valiosa herramienta de enseñanza y promoción de los derechos humanos y del conocimiento acerca de muy diversos temas, en el caso de Save de Children, por ejemplo, las historias y personajes están centrados en el bienestar y la dignidad de niñas y niños, acorde con sus objetivos de protección de las infancias.

Por último, refirió que todo esfuerzo de visibilización de derechos para las infancias a través de la lectura es valioso, sin embargo, “el ejemplo arrastra” y por ello es deber de madres, padres, personas cuidadoras y adultas relacionadas con el cuidado y la crianza de niñas, niños y adolescentes el predicar con el ejemplo, una familia donde la lectura es un hábito garantiza infancias interesadas en la lectura.

(Foto: Especial Portal)