Gabriela Landetta
El Estado de México es la única entidad del país que no cuenta con una ley específica en materia de salud y la normatividad que se aplica en ese rubro está contenida en el Libro Segundo del Código Administrativo del Estado de México, el cual ya resulta obsoleto, al tener más de 20 años de existencia, si bien en ese lapso ha sido modificado en múltiples ocasiones por la Legislatura mexiquense.
Una propuesta ciudadana busca llenar ese vacío normativo, ya que, a decir de distintas voces, el no contar con una ley en la materia ha propiciado que cada titular de la Secretaría de Salud de la entidad que es, a la vez, director general del Instituto de Salud del Estado de México, ISEM, trabaje como mejor lo considera conveniente, sin apegarse a un marco normativo exclusivo del sector.
Integrada por 14 títulos con sus respectivos capítulos, la iniciativa ciudadana de esta Ley de Salud del Estado de México contiene 179 artículos y 24 transitorios. En su estructura normativa considera las últimas reformas a la Ley General de Salud de 2022, lo referente al IMSS-Bienestar y a modelos de atención a la salud, además, se ajusta a la política actual en este renglón e incorpora el principio de universalidad para el acceso a los servicios.
De igual forma, considera el criterio de presupuesto progresivo y autoriza al gobierno estatal a obtener financiamiento a través de fondos locales, nacionales o internacionales. También crea el plan maestro de infraestructura física hospitalaria, unidades médicas y centros de salud, así como el registro para pacientes con cáncer.
Asimismo, la propuesta incorpora un apartado específico para la atención de la mujer y grupos vulnerables, así como prevención de la violencia ligada a la salud; considera aspectos para siniestros de la salud, epidemias y pandemias; establece el seguimiento y actualización de la norma jurídica, así como la vigilancia periódica del cumplimiento de la Ley de Mejora Regulatoria, a través de la Comisión de Salud de la Legislatura mexiquense.
En la propuesta y justificación del proyecto se precisa que el objetivo es “modernizar y actualizar el marco jurídico en materia de salud para la entidad que incluya los más altos estándares internacionales y retome las experiencias de otros países en la implementación de sus normas de salud. Lo anterior para fortalecer el sistema de salud de la entidad y coadyuvar a mejorar la prestación de servicios de salud y su cobertura en beneficio de la población que habita en el Estado de México”.
Nulo interés
Pese a las buenas intenciones que pueda tener la propuesta referida, desde agosto del año pasado parece estar olvidada en algún cajón de equis oficina de la Cámara de Diputados de la entidad, ya que ni siquiera ha sido turnada a la Comisión de Salud para su análisis y enriquecimiento, si bien la iniciativa contó en su momento con asesoría técnica de personal de la Organización Mundial de la Salud y de la Organización Panamericana de la Salud, y tardó más de tres años en elaborarse.
El coordinador general del proyecto, Eduardo Salazar López, vía oficios, ha buscado el apoyo de la Junta de Coordinación Política de la Cámara, sin que su presidente, Elías Rescala Jiménez, coordinador del grupo parlamentario del PRI, ni los demás integrantes de la Jucopo y coordinadores de las otras bancadas se hayan puesto en contacto con él para conocer con mayor detalle el proyecto.
“¿Esto qué quiere decir?, que refleja verdaderamente el nulo interés que tienen los diputados de legislar en este tema. No puede ser posible que una iniciativa que está considerada como de vanguardia y con visión global, y que retoma los más altos estándares internacionales que marca la OMS y la OPS, la sigan teniendo en el cajón, y lo que está ocurriendo es que, al interior de la Legislatura, durante las sesiones, los diputados promueven reformas legislativas al Código Administrativo”, lo cual, dice, no resuelve de fondo los diversos problemas que enfrenta el sector salud del Estado de México.
Salazar López explica que la propuesta no surge de la noche a la mañana, sino que es resultado de un trabajo de más de tres años, cuando él fungía como coordinador de asesores de la Comisión de Salud de la Legislatura anterior, y fue entonces cuando se firmó un acuerdo de cooperación con la Organización Mundial de la Salud y con la Organización Panamericana de la Salud, en el cual fue nombrado coordinador general del proyecto.
“Concluyó la Legislatura anterior, se quedó trunco el proyecto. Sin embargo, desde el espacio ciudadano acudí nuevamente con las autoridades de OPS y de OMS y continuamos trabajando”. Es por eso, asegura, que la iniciativa recoge los más altos estándares internacionales en el tema de salud: “El sentido de promover una iniciativa de Ley de Salud es con la finalidad de dotar al Estado de México de un marco jurídico apropiado, moderno, actualizado con los más altos estándares internacionales”.
Además de la indiferencia de la LXI Legislatura, la propuesta ciudadana para crear una Ley de Salud para la entidad también ha enfrentado obstáculos precisamente en la Secretaría de Salud estatal. Al respecto, Salazar López cuenta que luego de asumir el cargo como titular de la dependencia, Macarena Montoya Olvera lo mandó buscar, al enterarse del proyecto, pues quería conocerlo, pero con la intención de impulsarlo como si se tratara de una iniciativa emanada de la secretaría, no como un documento realizado desde el ámbito ciudadano. Al no recibir el proyecto como esperaba, Salazar López mencionó que la secretaria de Salud, molesta, le dijo que entonces su oficina iba a elaborar su propia iniciativa.
Eduardo Salazar cuestionó ante medios de comunicación que, si ellos tardaron más de tres años en realizar ese trabajo y contaron con la asesoría de personal de la OMS y de la OPS, cómo es que la Secretaría de Salud va a tener lista una iniciativa de ley en la materia en un par de meses. A menos, dijo, que contaran con un extraordinario grupo de asesores, y relató que, tiempo después, lo volvieron a llamar de la dependencia para que les brindara asesoría en la elaboración de su iniciativa de ley de salud.
Después de ese episodio, el pasado 15 de diciembre le envió un oficio a la gobernadora Delfina Gómez Álvarez, para solicitarle una reunión a fin de presentarle el documento. Sin embargo, un mes después, el oficio fue remitido a la Secretaría de Salud, en donde el titular de la Unidad Jurídico-Consultiva de Igualdad de Género del Instituto de Salud del Estado de México, ISEM, Miguel Ángel Gaytán Calderón, dio respuesta señalando que “el proyecto no es viable de atender, que la propuesta de iniciativa de ley no es viable, según su criterio”.
Salazar López expresa que “este tipo de respuestas, provienen de un recién nombrado servidor público del Instituto de Salud, que no conoce el sistema de salud de la entidad y que, aparte, se está extralimitando en sus atribuciones, porque él solito se constituye como un poder que es el Poder Legislativo, y él solo determina que el proyecto no es viable, cuando ni siquiera ha tenido conocimiento del proyecto ni nos han convocado ni nos han invitado”.
Sobre esas declaraciones, agrega: “Este funcionario dice que el proyecto no es viable, lo cual refleja una total y profunda ignorancia en cuanto a este tema, porque el Poder que tiene la obligación de definir si un proyecto legislativo es viable o no es el Poder Legislativo, son los diputados y la comisión dictaminadora, que es la de Salud”, por lo que no descarta iniciar un procedimiento administrativo en contra de ese funcionario, “por estar invadiendo esferas que no son de su competencia”.
Pese a todo lo anterior, Salazar López asegura que no hay interés de confrontarse con la secretaria de Salud, Macarena Montoya, sino que, por el contrario, el ánimo es totalmente constructivo para beneficiar a la población del Estado de México.
Trabajadores, sin certeza jurídica
Por otro lado, Antonio Monroy Gutiérrez, líder de la sección 35 del Sindicato de Trabajadores del Sistema Nacional de Salud, STSNS, señala que es necesario contar cuanto antes con una ley que regule toda la actividad relacionada con el sector.
“Tenemos que insistir para que los diputados hagan el proceso legislativo que corresponde. Yo quiero puntualizar que es necesaria una ley de salud. En este momento lo digo como representante de un nuevo sindicato, no hay certeza jurídica para la protección y la salvaguarda de los derechos de sus trabajadores. Hoy los trabajadores de la salud estamos confundidos, ya no sabemos si somos de aquí o somos de allá; ¿somos del IMSS- Bienestar o somos de la Secretaría de Salud?, cuestiona al referirse a la incorporación al programa del IMSS-Bienestar, como parte de la política federal en materia de salud. Sin embargo, a decir de Eduardo Salazar López ni siquiera se tiene la certeza jurídica de que la propia secretaria de Salud, Macarena Montoya, pueda tener esa facultad de firmar un acuerdo de adhesión al IMSS-Bienestar, si ni siquiera se cuenta con una ley para respaldar ese tipo de acciones.
Con la iniciativa de ley propuesta desde la ciudadanía se pretende atender ese tipo de situaciones, dándole certeza jurídica a los trabajadores del sector, así como evitar problemas como el desabasto de medicamentos como sucede actualmente, o que se roben recursos destinados a la infraestructura hospitalaria y, en términos generales, mejorar el sistema de salud en beneficio de los mexiquenses.
Fotos: Gabriela Landetta, IMSS y especial Acta Semanal.
