En el marco del Día Mundial del Turismo, la Facultad de Turismo y Gastronomía de la Universidad Autónoma del Estado de México, organizó los días 28 y 29 de septiembre el Primer Encuentro Latinoamericano de Estudiantes, mismo que será realizado vía virtual a través de la página oficial del espacio académico en Facebook.
Aranxa Albarrán
A las 9 de la mañana del día 28, el Doctor Marcelino Castillo Nechar, inauguró el evento con una conferencia magistral, la cual tuvo como fin desarrollar la temática del Turismo Rural como motor de desarrollo, esto también por ser el 2020 definido por la Organización Mundial del Turismo como el año del Turismo Rural.
El investigador perteneciente al Sistema Nacional de Investigadores, mencionó que el turismo rural es un pilar destacado del sector para mantenerse, especialmente cuando se pretende regresar a una mejor incorporación de programas sustentables en el sector. Sin embargo, a lo largo de los años, la admisión de control y apropiación de empresas hegemónicas de turismo, especialmente de capital extranjero, han impedido que se introduzcan beneficios para los locatarios, quedándose ellos con la mayor parte de las ganancias y gestionando cada uno de los productos desarrollados a través de agencias externas al destino rural.
“El turismo rural se ha visto como mero producto turistificable para las redes de venta. Se ha hecho uso inadecuado de su fauna y un usufructo de patrimonios, territorios y pobladores. Se crean fincas llamadas ecoturisticas sin la necesidad de integrar a sus habitantes para participar en los beneficios que pueda aportar. Solo con la intención de generar ganancias económicas a las empresas que dirigen las actividades.” Comentó.
Según lo aportado por Nechar, en América Latina las principales organizaciones que ofertan productos turísticos en zonas rurales son externas al destino promocionado, siendo ellas las primeras encargadas de organizar al turismo rural sin permitir que la comunidad realice sus actividades y verdaderamente reciba apoyo de ello.
Las tour-operadoras tienen bajo su comando la planeación de cada elemento necesario para el viaje del turista, incluyendo actividades y acceso a recursos tradicionales, siendo modelos convencionales que no son de carácter de turismo rural comunitario, sino sencillamente como manera de generar capital.
La creación de un turismo rural mercantilizado, ha ido fortaleciéndose gracias al nuevo desarrollo neoliberal, el cual dio paso a senderos que han generado una brecha entre la concentración de la pobreza, exclusión social, precarización del empleo rural, entre muchas otras. Por ello, las continuas migraciones de campo se visibilizan con intensidad cada año, evitando una sinergia entre el turismo rural y la ruralidad en su entereza.
Por otra parte, la destrucción de ecosistemas derivado de una implementación de proyectos turísticos en zonas indígenas y/o rurales es uno de los principales factores de afectaciones a las zonas, por ende, la imagen de un turismo sustentable se ve distorsionada.
El Doctor argumentó que las operadoras de viajes muestran como estrategia de marketing a “territorios que se presentan pobres pero felices” generando daño a su integridad.
Finalmente, abordó que no solo es necesario hablar de las grandes organizaciones, sino de las aspiraciones y retos que tienen nuestras comunidades que confluyen en un ambiente neoliberal.
“El reto que representa un nuevo modelo de turismo rural debe de integrar una mejor capacitación, una mejor inclusión de las comunidades, centrar los intereses de los pueblos rurales e indígenas, y repensar en una política turística adecuada para su completo beneficio y respeto a su cultura y recursos.”
Foto: Aranxa Albarrán
