28/Apr/2024
Portal, Diario del Estado de México

Oquetza, camino a la raíz

Fecha de publicación:

| Carla Valdespino Vargas

Montañas Sagradas II

… por eso hicieron de sus cabellos árboles, flores… de su piel las hierbas muy pequeñas…

de los ojos pozos, fuentes… de la boca ríos y grandes cavernas… de los hombros, montañas

Mito de creación nahua en la Historia de los mexicanos

Cerca del Mercado de San Cristóbal de las Casas, Maud y yo abordamos el transporte hacia San Andrés Sakamch´en de los Pobres; nuestro interés por la lucha zapatista nos llevó a visitar el lugar donde se firmaron Los Acuerdos de San Andrés, acuerdos que hoy, por desgracia han quedado en el olvido y la situación en Chiapas cada día se agrava más.

La taxicombi nos dejó al pie de carretera, caminamos un poco por el pueblo y después, nos dirigimos a un cerro, cuya cima estaba hermosamente adornada con una cruz llena de flores. Nos sentamos en el pasto a admirar las montañas, montañas delineando el cielo, montañas acariciadas por las nubes. Fue entonces cuando se me ocurrió sacar mi cámara, esos colosos verdes tenían que ser parte de mis recuerdos digitales y, fue entonces cuando se acercó la policía del pueblo y, fue entonces cuando nos querían meter a la cárcel pues estaba prohibido sacar fotos y, fue entonces cuando no comprendí la explicación que nos dieron y, fue entonces cuando me pidieron, no de muy buena manera, borrar las fotos, de lo contrario nos encerrarían, al menos un día. No, no hay registro de esas nubes, de ese verdor, pero sí, una profunda enseñanza.

Los dos hombres batssil winik´otik (tzotziles) argumentaron ser los guardianes de las montañas y, que, sin el permiso de la comunidad, no se podían ser fotografiadas, pues se corría el riego de que se molestasen. Yo, una mestiza en ciernes a dejar de serlo y Maud, una occidental cien por ciento francesa, nos quedamos sin palabras ante tal explicación. Ese episodio tuvo significación para mí años después, cuando me adentré más al pensamiento mesoamericano.

Desentrañar el por qué las montañas podrían enojarse o por qué necesitan guardianes, será una tarea un tanto complicada pero que me aventuro a realizar y compartir con ustedes para que, cuando nos relacionemos con las montañas, ya sea para escalar, para admirar el mundo desde allá, e incluso sacar fotos, seamos más conscientes de la importancia de ese espacio sagrado.

La cima de la montaña-protagonista de esta historia estaba y, seguramente sigue así, adornada con una cruz llena de flores y, si hemos sido observadores cuando salimos de viaje o de paseo o simplemente cuando nos trasladamos a otra ciudad, nos habremos percatado de que muchos cerros y montañas se engalanan con una cruz en la parte más alta y nuestro primer pensamiento es vincularla con el  símbolo cristiano, sin embargo, su presencia está más relacionada con el pensamiento mesoamericano que con Jesús.

Las montañas son una imagen ecuménica del Monte Sagrado, lugar de creación donde se encuentra el germen anímico de cada cosa, animal, planta o persona que habita el tlalticpac (superficie terrestre), en cuya cúspide crece el Árbol sagrado, símbolo del axis mundi, el eje vertical del universo. Árbol que, en muchas ocasiones, también era representado por la planta del maíz, como se puede admirar en el Templo de la Cruz Foliada en la ciudad de Palenque. Es probable que, para alguno de los lectores resulte difícil la relación existente entre la cruz y la planta de maíz. Hagamos un ejercicio de observación y, estos días se presentan muy bien para tal efecto pues el maíz está espigando y hay uno momento en que las espigas forman una cruz perfecta.

Mas regresemos a las montañas adornadas con cruces y recordemos que son la representación del Tamoanchan y el Tlalocan en la tierra, sitios de origen y destino del tonalli. En el Tamoanchan se alberga la lluvia, el granizo, los ríos, los rayos, la fuerza de crecimiento… las semillas corazón. Mientras que el Tlalocan es la montaña hueca llena de frutos y cuyo fondo está lleno de agua que se interconecta con otros cerros a través de ríos y cuevas cuya comunicación extiende sus brazos hasta el mar. Ambos espacios son diferentes, pero coincidentes.  Las montañas son el eje cósmico; punto de ascenso y descenso de los astros; bodega de riqueza; refugio de la flora y fauna; casa del dios patrono; lugar de origen de los hombres; fuente del orden social, poder y autoridad… morada de los muertos.

En este recorrido nos hemos percatado de que cuidar a las montañas es trascendental, ya que están ligadas con la vida misma. Cuidar y defender como lo hicieron los hombres Batssil winik´otik y como lo hizo el pueblo Jùba Wajìn contra las mineras. Y, para ser honesta, el tema de las montañas apenas comienza y por ello, sigamos juntos en este camino a la raíz.

Espacio de reflexión decolonial sobre el mundo mesoamericano y

las naciones indígenas del siglo XXI

ipalnemohuani77@gmail.com

ig: @oquetzacamino   FB: Oquetza. Camino a la raíz

Noticias Relacionadas

Derecho de Picaporte

28/12/2020

28/12/2020

Alfonso Godínez Mendiola  Ayer les comentamos los 16 distritos electorales en los que el PRI irá en alianza con el...

La Sociedad Pregunta…

19/02/2020

19/02/2020

¿Son Fallidos los Gobiernos que no Garantizan Seguridad a la Ciudadanía? Definitivamente puede considerarse que un gobierno que no es...

¿Te gusta la política?, IEEM abre concurso de investigación y ensayo político

06/07/2023

06/07/2023

Los casos de estudio y descriptivos o estudios sobre temas políticos de actualidad, podrán ser parte del XXVI Certamen de Investigación y Ensayo...

Mención Aparte

14/02/2023

14/02/2023

José Luis Rodríguez FOTOGRAFÍA DE EVENTOS MASIVOS, ILUSIÓN ÓPTICA QUE NO GARANTIZA NADA Cuánto revuelo, emoción e ilusión, han levantado...

Poesia en línea por Rafel Saravia de parte de #CulturaEnUnClick

09/04/2020

09/04/2020

El escritor y poeta Rafael Saravia a través del programa “CulturaEnUnClick organizado por la Secretaría de Cultura del Estado de México,...