Ivan Joatzay
Como ha precisado el presidente Andrés Manuel lópez Obrador, las personas objetivo de los Programas del Bienestar son las más vulnerables del país. En este sentido, da énfasis a habitantes de comunidades rurales, de la tercera edad, y de algunas zonas marginadas de las urbes.
En ‘La Epifanía’, zona rural cercana a Santa Clara de Juárez, en el municipio mexiquense de Morelos,pobladores de la zona, quienes se dedican a la agricultora y ganadería, afirman que “dentro del pueblo, son cerca de 100 personas” acreedoras del apoyo para personas de la tercera edad, las escuelas primarias y secundarias son beneficiadas con clara accesibilidad a las becas ‘Benito Juárez’.
Una integrante del pueblo, quien prefirió mantener su identidad en el anonimato, explicó que los apoyos gubernamentales mantienen presencia desde “hace un par de años” en la zona y en su caso particular, al ser cuidadora de su madre, una mujer mayor, recibe el apoyo para personas “de 65 años y más”.
La mujer mexiquense afirmó que el apoyo “a ella [su madre], sí le ha servido” y, aunque tiene poco tiempo de registrarse en el programa, “es lo que te aporta para solventar lo de sus medicinas” y gastos para el mantenimiento, entre ellos, comida y ropa de la mujer mayor:
“Tiene poquito de recibirlo, pero sí nos ha ayudado, ya con eso no nos estamos preocupando tanto de sus gastos o lo que necesite porque sí son gastos en el medicamento y eso.”
SI bien, los estímulos abundan entre despensas, material agricultor o sumas monetarias, los acreedores de la zona afirmaron que “no es responsabilidad del gobierno hacerlo todo”. A pesar de que las becas para estudiantes o pensiones para adultos de la tercera edad “si nos ayudan un poquito, realmente no cubren las necesidades” y los residentes de la comunidad continúan laborando en los rubros de construcción, ganadería y producción agricultora.
“Hay que buscarle de dónde. No puedes estar esperando que el gobierno te resuelva tus necesidades y sí le seguimos chambeando para todo”,expresó la residente de ‘La Epifanía’.
Como ha precisado el presidente Andrés Manuel lópez Obrador, las personas objetivo de los programas sociales, son las más vulnerables del país. En este sentido, da énfasis a habitantes de comunidades rurales, de la tercera edad, y de algunas zonas marginadas de las urbes.
“Bienestar” en Toluca
Emanuel Everardo, un hombre de 85 años de edad perteneciente a la zona de Almoloya de Juárez, quien actualmente se dedica a la “pastoría”, o cuidado de ovejas, afirmó que, aunque es beneficiario del programa para adultos mayores, “el gasto no me alcanza” y se ve forzado a administrar sus ganancias ypedir apoyo de personas desconocidas en la capital mexiquense durante su tiempo libre.
“Yo ya no puedo trabajar, tengo 85 y ya no me dan trabajo. La verdad no me es suficiente, sí me hace falta para comer luego, pero ahí estoy en la casa nomás cuidando mis 6 borreguitas.”
Por su parte, Gerardo Rivera, residente de una zona rural, afirmó que, si bien recibe el mismo apoyo económico para solventar sus gastos, tampoco es suficiente, por lo que continúa con su actividad agrícola. Explicó que, aunque el estar afiliado al programa de bienestar es un cambio significativo para su vejez, no solventa la subsistencia económica de su familia.
“Para nosotros que ya no trabajamos apenas nos queda bien para comprar algo que nos haga falta como una chamarra o pantalón, o la comida, pero no es suficiente, yo le trabajo al campo. Ahorita ando acá porque tengo que buscar otras opciones en la temporada de lluvias”, expresó el hombre.
De acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos en los Hogares (ENIGH), actualmente, el Estado de México se posiciona como la 22ª entidad con mayor cantidad de ingresos en un hogar, esto con una cantidad de 57 mil 233 pesos trimestrales que provienen de la remuneración salarial, el trabajo independiente, remesas, trasferencias y/o apoyos gubernamentales.
(Foto: Ivan Joatzay)
