Ivan Joatzay
En la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx) existen distintas comunidades, áreas, proyectos y capítulos encargados de especializar y desarrollar el progreso estudiantil de los jóvenes universitarios. Para este caso, en entrevista con Portal, Alejandro Puebla, capitán de un equipo de ingenieros, y Saúl López Fuentes, ayudante general de dicho equipo, contaron acerca de su experiencia y la historia detrás de la ‘Escudaría Sara Juana Racing Team’, un equipo de más de 20 años encargado de participar, representando a la UAEMéx, en la competencia estudiantil automotriz Baja SAE.
En un inicio nombrado ‘No Fail’ pero después renombrado ‘Sara Juana’ en inspiración a la pistola del caballo ‘Treinta-Treinta’ de la caricatura ‘BraveStarr’, el equipo de Baja SAE fue fundado en el año 2001 por un grupo de ingenieros universitarios que buscaba implementar sus conocimientos en el campo y pasarlos del aula a la vida real, construyendo un auto de carreras todo terreno que les permitiera participar en las competencias; pero que también los ayudara a especializarse dentro de la mecánica y teoría detrás del funcionamiento de los vehículos.
Como comenta su capitán, Alejandro, el equipo siempre ha tenido la intención de ser una motivación y un sentido más para los estudiantes que lo conforman, desarrollando habilidades y adentrándose en el campo laboral a través de la práctica:
“Muchas veces nosotros, cuando egresamos, no tenemos experiencia alguna cuando llegamos al mundo laboral, entonces el objetivo de este capítulo estudiantil es poder acercar a los estudiantes para que puedan hacer reportes, seguir normativas, seguir un reglamento y, también, aplicar tus conocimientos para poder resolver un problema de ingeniería y, más que nada, el trabajo en equipo”
Con una cantidad de 25 integrantes, el equipo Sara Juana divide sus labores en 7 subsistemas que hacen posible el funcionamiento de sus vehículos: administrativo (que se encarga de buscar los patrocinios y el recurso para solventar los gastos del equipo), diseño (que diseña la estructura del carro), transmisión (que está detrás del sistema de poder que da energía al carro para que pueda correr), ergonomía (que revisa el área del asiento y del piloto para que este vaya cómodo pero que a la vez no se lastime durante sus competencias), frenos, eléctrico (que supervisa el área de luces y la conexión entre el motor y el switch) y suspensión (que es una de las área vitales debido a la naturaleza del automóvil, encargándose del área de ensamble, estabilidad y seguridad dentro del carro, generando soporte para movimientos más suaves y que absorban impactos del camino).
Con una historia de evolución constante, la escudería ha atravesado distintos cambios y ha reformado su paso por las competencias, pasando de un proceso de aprendizaje a un proceso de mejoría para su trabajo y ellos mismos.
El equipo nos cuenta que, durante sus dos décadas, han llegado a construir más de 7 vehículos todo terreno y que, aunque estos verían en su desempeño, todos han sido construidos con la misma intención de mejorar su juego dentro de la competencia Baja SAE. Como dato curioso, en una fidelidad a sus inicios y su universidad, la escudería ha decidido que todos los carros que han construido sean nombrados con referencias hacia los caballos como fue con “Pegasso”, “Interceptor”, o “Estrategos”, algunos de sus vehículos pasados que ya han sido desmantelados o colgados en su taller.
Ahora, aunque profundizamos con la escudería en su identidad como equipo, Alejandro comenta que Sara Juana se ve fuertemente vinculada a Baja SAE, una asociación de ingenieros automotrices reconocida mundialmente que se encarga de convertir competencias estudiantiles en espacios de experiencia para que los universitarios puedan adquirir aprendizaje sobre el mundo laboral. Desde el año 2009, el equipo se ve anualmente enfrascada en las dos competencias que ofrece Baja SAE: el nivel nacional; una competencia comúnmente realizada en Calimaya donde participan alrededor de 20 universidades públicas del país, y el nivel internacional; 3 competencias anuales donde compiten más de 100 universidades de todo el mundo, destacando países como Canadá, México, Ecuador, India, Rusia o China.
Pero ¿A qué se enfrenta Sara Juana en Baja SAE? En pocas palabras, la competencia se divide en 4 días que abordan distintas inspecciones al carro, su reglamentación, medidas, materiales, diseño, rendimiento y eficiencia, haciendo de ‘Endurance’ su prueba más importante; una carrera de 4 horas donde gana el vehículo que haga más vueltas debido a su resistencia en trayecto y tiempo.
Como menciona Saúl, integrante del equipo, Baja SAE se ve entrelazada con la historia y motivación de Sara Juana no solo por ser un evento de competencia o de reconocimiento, sino, porque, a lo largo de sus 12 años compitiendo nacional e internacionalmente, ha permitido al equipo poder superarse:
“Yo siento el equipo deseoso de poder ir a más competencias para poder demostrar que no nada más somos un capitulo estudiantil más que solo quiere ir a ‘lucirse’, sino, que simplemente queremos ser mejores y dar lo mejor, competencia por competencia”.
Con su auto más actual, Incitatus, siendo este una propuesta de tamaño más grande a sus previos “caballos”, Sara Juana ha estado participando con él durante los últimos años y, a pesar de su diferencia a diseños previos, ha sido uno de los autos que ha dado más rendimiento dentro de toda la historia del equipo.
Entre sus complicaciones, el equipo nos cuenta que han atravesado por problemas de comunicación desarrollados desde la pandemia y en el sustento económico para la mejoría y construcción del Incitatus. Su capitán menciona que, aunque es un proceso complicado para conseguir el impulso necesario para solventar al equipo, Sara Juana se siente muy agradecida con el apoyo de sus patrocinadores (entre ellos ‘Bosch’, ‘Why not? Corte Láser’ y ‘Ansys’) y la universidad: “tenemos una buena relación; nos han apoyado con transporte para llevar a las personas a las competencias los 4 días, el hospedaje y también pagar las inscripciones que tampoco son nada baratas”.
Actualmente, la escudería se encuentra recaudando fondos a través de rifas y ventas de comida para llegar a sus próximas competencias en México y Tennessee, Estados Unidos. Más adelante, los chicos de Sara Juana esperan construir un nuevo vehículo con un sistema 4×4 que necesita de necesita de sustento económico y nuevas piezas para así llegar a la manufacturación.
Con un mensaje final, Alejandro, invita a seguir al equipo en sus redes sociales (‘Baja SAE UAEMéx Escudería Sara Juana RT’ en Facebook y ‘@saesarajuana’ en Instagram) y apoyarlos:
“Estamos en búsqueda de apoyo. Créanme que todo el apoyo, sea muy mínimo o muy grande, es bien recibido, todo eso ayuda a que el equipo pueda competir y pueda haber este tipo de proyectos en la escuela, no solamente para nosotros sino también para las siguientes generaciones. (…) Nosotros tenemos un lema que se llama ‘hasta el tornillo más pequeño hace la diferencia’, cualquier ayuda es bien recibida y siempre estamos aquí tratando de dar lo mejor de nosotros para poder representar a nuestra universidad y ponerla más alto”.
(Foto: Ivan Joatzay)
