Leobardo Hernández
“Lástima, Chumel”, dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador aludiendo a uno de los muchos opositores que pronosticaron, con la llegada de la 4T, que el ya funcional Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles sería un proyecto “imposible”, incluso de empezar; no obstante, este 21 de marzo el mandatario entregó la estructura sin costo adicional y en tiempo récord de conclusión, tan solo dos años con cinco meses.
Durante la conferencia matutina, el líder del poder ejecutivo federal agradeció a los trabajadores que culminaron con una obra titánica, cuya ambición es ser uno de los mejores aeropuertos a nivel mundial.
Al respecto, expresó: “Agradecer mucho a los trabajadores de la construcción, ellos son el alma de todas las obras; agradecerle, desde luego, a los ingenieros militares; agradecerle a los pobladores, a los municipios alrededor de este complejo aeroportuario ayudaron mucho. (…) También las empresas mexicanas, los proveedores. Es la suma de voluntades lo que hizo posible esta construcción”.
A su vez, puntualizó que el modelo de aeropuerto está diseñado para el fácil acceso de todos, usuarios y trabajadores, quienes contarán con varias vías y sistemas de transporte para llegar. En este sentido, ejemplifició su propio caso, e indicó que del Palacio Nacional a las instalaciones del Felipe Ángeles hizo un recorrido de aproximadamente 35 minutos “sin tráfico”.
Asimismo, se dio a conocer que hay 5 obras en proceso de ampliar el acceso al complejo aeroportuario, siendo éstas: el distribuidor principal de acceso al AIFA, que lo conectará con el Circuito Exteror Mexiquense; la ampliación de la línea 1 del Mexibús, que tendrá una extensión de 20 kilómetros con 12 estaciones y saldrá de Ciudad Azteca y pasará por Ojo de Agua, Tecámac; la ya concluida Autopista Siervo de la Nación con 14 kilómetros de longitud; la Conexión Oriente- Conectividad AICM, con 22% de avance y Gazas Río de los Remedios para conectar la México-Pachuca con Insurgentes y la ampliación de la autopista Naucalpan-Ecatepec.
A su vez, el presidente enfatizó que el nuevo aeropuerto será un bien que traiga beneficios no sólo a los usuarios, sino a los habitantes de municipios aledaños, quienes encontrarán nuevas fuentes de empleo, en una de las zonas más remotas del Estado de México.
Por su parte, el general Luis Crecencio Sandoval informó que, el aeropuerto arrancó actividad con 20 operaciones: “ cuatro vuelos de Aeroméxico, seis de Volaris, cuatro de Viva Aerobús, dos de Conviasa; también tenemos dos vuelos de la aviación general procedentes de Estados Unidos, vuelos en aviones particulares; también dos operaciones de carga por parte de la empresa Incon, que vienen también de Laredo, Texas, y de Saltillo, Coahuila. Ya también están disponibles en el área de la base de helicópteros seis helicópteros que van a prestar el servicio de taxi aéreo aquí en la instalación”.
Por su parte, Gustavo Vallejo, ingeniero residente general y comandante del agrupamiento de ingenieros Felipe Ángeles, detalló que el aeropuerto “es un predio de más de tres mil 800 hectáreas que se compone de dos partes principales: una ciudad militar, donde se encuentra la base aérea militar en la parte sur que está atrás de ustedes; y esta parte, la parte norte, se encuentra propiamente el aeropuerto internacional”.
También sostuvo que la obra tiene la capacidad para movilizar a 20 millones de pasajeros, así como el potencial para desarrollar más edificaciones comerciales en la ciudad aeroportuaria “como puede ser corporativos de empresas aeronáuticas, hospitales, centros de capacitación, centros comerciales y más hoteles”. Igualmente, señaló que por primera vez un aeropuerto cuenta con “capillas, zonas de lactancia, tenemos espacios culturales, juegos infantiles y baños temáticos para darle una experiencia completa a los pasajeros”.
Igualmente, refrendó que “nuestras tres pistas tienen los mejores sistemas de aterrizaje por instrumentos del país y equiparados con los mejores del mundo. Tenemos también una torre de control de tráfico aéreo con lo más avanzado en la tecnología que puede tener un aeropuerto de clase mundial [….] Pero también algo muy novedoso, tenemos una terminal comercial de helicópteros como no hay en el país, que tiene instalaciones para 26 helicópteros y una propia pista de aterrizaje y despeje de este tipo de aeronaves de ala rotativa”.
Ya en la ceremonia de entrega-recepción del aropuerto, Vallejo expresó que el aeropuerto también alberga 3 museos de gran magnitud, muestra, dijo, “que podemos construir, sin destruir nuestro pasado”.
Éstos son: el museo paleontológico Quinematzin, donde además de exhibir esqueletos de mamuts hallados durante la construcción del AIFA, investigadores nacionales y extranjeros desarrollan estudios; asimismo se encuentra el museo Militar de la Aviación, “que dignifica el gran legado histórico de la aeronáutica militar nacional” y, finalmente, el museo del ferrocarril, que documenta la historia de este transporte en México.
(Foto: Presidencia)
