Miguel García Conejo
Luego de las fiestas decembrinas y de fin de año, este lunes se recupera formalmente la actividad y, tras casi un mes de encuentros familiares, la constante de desechos en cada hogar es el unicel.
Regalos, comidas, envíos han generado que este material según estimaciones de ambientalistas esté material se haya incrementado hasta en un 30 por ciento en este fin de año en cada hogar.
De acuerdo con Michelle García, bióloga de la Universidad Autónoma del Estado de México (Uaemex), es fundamental alentar la recolección temporal de unicel, luego de que durante las fiestas decembrinas este tipo de material tuviera un incremento en su uso.
Explica que este material puede ser reciclado, creando algunos moldes, además de marcos y otros materiales, ante lo cual es necesario promover la disposición correcta de platos, vasos y otros materiales a base de unicel.
Señala que si bien el primer objetivo es el reducir el consumo de unicel, debido a su alto impacto ecológico, al no ser un material biodegradable que tarda más de 100 años en desintegrarse, la clave es concientizar a la población para su correcta disposición.
Durante estas fiestas decembrinas dicho material estuvo presente tanto en utensilios de cocina, como en el embalaje de otros productos, por ello, una forma de ayudar al planeta es el tener un adecuado manejo del unicel y con ello evitar que termine en cuerpos de agua o en tiraderos a cielo abierto.
Cabe señalar que el programa de las Naciones Unidas para el medio ambiente ha señalado que más de 8 millones de toneladas de plástico llegan al mar cada año, mientras que en México, la Asociación Nacional de industrias del plástico (Anipac) estima que anualmente se consumen 125 mil toneladas de unicelulares en México.
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