Miguel García Conejo
El Instituto de Salud del Estado de México llevará a cabo un diagnóstico en las escuelas del estado para detectar cual es la cifra actual de niños con sobrepeso y obesidad, que previo a la pandemia de COVID-19 era del 12 por ciento; sin embargo por el confinamiento y las largas horas frente al televisor temen que esta haya ido en aumento.
De acuerdo con el Jefe del Departamento de Infancia y Adolescencia del Instituto de Salud del Estado de México, Jaime Edwin Contreras Sánchez, datos de la Organización Mundial de la Salud, mencionan que tras el confinamiento el índice podría alcanzar entre 20 y 25 por ciento.
De ahí que necesiten reevaluar a los niños, niñas y adolescentes, a fin de detectar estos problemas de alimentación y con ello retomar las actividades físicas, tras el retorno presencial a las aulas.
A decir del funcionario, este tipo de actividades o programas se vieron suspendidos por la emergencia sanitaria que obligó a los niños a dejar las aulas, por lo que, dijo, es momento de retomarlas.
Reconoció que no se dio antes porque los esfuerzos estaban enfocados a monitorear los casos de COVID-19 entre maestros, y alumnos.
Explicó que el exceso de alimentación poco nutritiva en la mayoría de las naciones latinas ha provocado que adultos y niños enfrenten enfermedades, además de comorbilidades que como diabetes, hipertensión o enfermedades cardiovasculares, que representan las principales causas de muerte.
Recordó que en México, por ejemplo, 7 de cada 10 adultos y 1 de cada 3 niños tienen sobrepeso u obesidad; ambos padecimientos constituyen el problema nutricional más relevante para la salud de todas las edades.
Especialistas de salud advierten que en la población existen tres perfiles distintos basados en los hábitos alimentarios de las personas:disciplinados, intermedios e indisciplinados
La población disciplinada es aquella que selecciona alimentos saludables de acuerdo a su funcionalidad; los intermedios consideran la calidad de la comida, pero también buscan satisfacer sus antojos; finalmente, los indisciplinados basan su selección únicamente en el placer que les brindan los alimentos.
(Foto: de archivo, Aranxa Solleiro)
